Las estrellas desaparecen del cielo nocturno urbano más rápido de lo que indican las mediciones satelitales. Así lo reveló el estudio «Globe at Night», un programa de ciencia ciudadana que dirige el Centro de Investigación NOIRlab de la Fundación Nacional de Ciencia y la Asociación de Universidades para la Investigación en Astronomía de Estados Unidos.
Los resultados señalan que la creciente contaminación lumínica priva al 30 por ciento de las personas en el mundo del espectáculo del cielo nocturno. Por ejemplo, ahora es imposible ver a cielo abierto los brazos de la Vía Láctea, galaxia en la que se encuentra el sistema solar.
Se analizaron más de 50 mil observaciones a simple vista que realizaron científicos ciudadanos en el mundo entre 2011 y 2022. Los resultados muestran que la contaminación lumínica no solo perjudica a la astronomía, sino también a otros aspectos de la vida humana y animal.
Por ejemplo, en gran parte de la superficie terrestre, el cielo brilla con un crepúsculo artificial mucho después de la puesta de sol. Este «resplandor celeste» es una forma de contaminación lumínica que tiene graves efectos sobre el medio ambiente.
«El ritmo al que las estrellas se vuelven invisibles para las personas en entornos urbanos es dramático», resume Christopher Kyba, autor principal del estudio.
Los investigadores descubrieron que el cambio en el número de estrellas visibles se puede explicar por el aumento del brillo del cielo nocturno. Los datos indican un incremento en el brillo del cielo de 9.6 por ciento por año durante la última década.
Recuerda suscribirte a nuestro boletín