Un residente de la provincia rusa de Tver encontró unas partes del esqueleto de un mamut, de aproximadamente 45 años, en en el acantilado izquierdo del río Ivitsa.
Luego del hallazgo, una expedición confirmó que esos restos son de un mamut de la tundra, de acuerdo con los estudios preliminares que efectuaron a los huesos y dientes extraídos de la roca en la que estaban.
Hasta ahora se pensaba que en el pasado estas especies habitaban solo Eurasia del Norte. No obstante, este descubrimiento arrojan luces sobre su existencia en el territorio de la provincia de Tver, ubicada en el distrito federal central de Rusia, reseñó Sputnik.
En esa zona conocida como la llanura europea oriental, encontrarse con restos de estos animales es algo inusual.
Además, estas nuevas partes permitirán a los paleontólogos efectuar investigaciones más complejas que incluyan el estudio de las capas geológicas, la determinación de condiciones en las que habían sido formadas, la descripción morfológica de huesos y la búsqueda de huesos y dientes de animales que vivieron en aquella época.
Los restos de mamuts que ya están resguardados en los museos de Tver no contienen la información completa de los lugares donde fueron hallados, por lo que este descubrimiento es importante para que avancen las investigaciones.
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