Una empresa privada de Israel anunció que para el año 2019 esa nación intentará ingresar en el selecto grupo de países que han llegado a La Luna.
El anuncio lo hizo Morris Kahn, presidente de la empresa sin fines de lucro, SpaceIL, durante la presentación del artefacto que podrán en la Luna.
Kahn aclaró que la empresa que puso en marcha el proyecto en 2011, informó que el vehículo lunar será el más pequeño que se posará en satélite natural de la Tierra. Pesa 600 kilos y dos de sus terceras partes es combustible.
“La nave tiene un diámetro de dos metros por un metro y me
La Vanguardia
dio de altura y se convertirá en la aeronave más ligera en alcanzar la Luna después de ocho años de trabajo”, aseguró.
La sonda espacial comenzará a transmitir imágenes y video dos días después de posarse en la superficie y medirá el campo magnético como parte del un proyecto científico.
La aeronave recorrerá los 384 mil kilómetros que separan la Tierra de La Luna, a cinco veces la velocidad de un avión caza. Contará con paneles solares y un sistema de control remoto para sus cámaras.
El director de operaciones del proyecto, Yossi Weiss, reconoció que con el lanzamiento de la sonda a la Luna y su llegada, se abre un nuevo camino a la exploración espacial, ya que de tener éxito con un proyecto relativamente económico, ya no son necesarios los altos presupuestos gubernamentales para ir a La Luna.
Para que el proyecto viera la luz, se requirió del aporte de varios empresarios e Israel se comprometió a cancelar 10% del total del presupuesto, sin embargo no ha hecho el pago.
Si nada falla, el 13 de febrero de 2019 la aeronave se posará en la superficie lunar. La aeronave despegará en diciembre de 2018 desde Cabo Cañaveral en Florida.
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