Autoridades de la NASA anunciaron la extensión de la misión de la sonda Juno quien se encuentra en órbita de Júpiter desde 2016 a 8 millones de kilómetros del gigante del sistema solar.
Según las fuentes de la agencia espacial norteamericana, la sonda espacial está trabajando en perfectas condiciones pese a que los técnicos detectaron algunas posibles fallas en sus válvulas de propulsión.
Por esta razón los científicos de la NASA cancelaron la maniobra de acercamiento que llevaría al transporte de instrumental a tan solo 1,9 millones de kilómetros de Júpiter. Desde la agencia espacial se tomó la decisión de tener la sonda funcionando, -en otra órbita pero bajo control-, que perderla.
Debido a esta decisión, la sonda deberá tomar más tiempo para conseguir los datos de la misión. La diferencia de 5 millones de kilómetros de distancia con respecto a su órbita final, hacen que los datos que recoge tengan menos resolución pero son válidos.
Debido al mediano éxito de la sonda, un comité externo de expertos, recomendó a la agencia mantener la misión operativa, decisión que fue tomada por la NASA, quien determinó que se mantendrá activa hasta julio de 2021 para recolectar todos los datos posibles antes de desintegrarse en la atmosfera de Júpiter.