Un nuevo método, que aún está en fase experimental, podría revolucionar la manera de tratar el cáncer de próstata. El estudio, dirigido por el profesor Sam Denmeade, de la Escuela de Medicina de la Universidad John Hopkins, en Baltimore, Estados Unidos, atacó un cáncer de próstata en estado avanzado usando testosterona, informa RT.
El tratamiento experimental se probó con un paciente que sufría un cáncer de próstata en estado avanzado, administrando altas dosis de testosterona, en contraste con el método convencional, que opta por reducir la cantidad de esta hormona por considerarla un incentivo al crecimiento tumoral es este tipo de cáncer.
Para la investigación participaron 47 voluntarios que se sometieron a períodos de altas y bajas dosis de testosterona alternadamente (lo segundo se logró a través de un fármaco que inhibe la producción de la hormona masculina).
El doctor Sam Denmeade y su equipo se valieron de un marcador sanguíneo para detectar los niveles de cáncer en los participantes, los que indicaron un descenso del desarrollo tumoral en la mayor parte del grupo. Pero en uno de los individuos no se hallaron señales del marcador, indicando que la reducción del cáncer fue total.
Denmeade describe los resultados del estudio como «inesperados y fascinantes», aunque todavía los investigadores no entienden en detalle cómo opera el mecanismo detrás del resultado.
«Todavía necesitamos comprender mejor cómo funciona y cómo incorporarlo para combatir el cáncer de próstata» declaró Denmeade al medio The Telegraph.
El equipo planea continuar continuar con la investigación, para desentrañar cómo influye la testosterona en la reducción tumoral y probar si se observan más casos con mejoras significativas.
El Ciudadano