Según un estudio, publicado en Nature Neuropsychopharmacology, un químico que se encuentra en la marihuana podría usarse para tratar la adicción a las drogas y el alcohol.
El químico, llamado Cannabidiol (CBD), se encuentra en la planta Cannabis sativa que produce flores de marihuana (cogollos). A diferencia del Tetrahidrocannabinol (THC), el CBD no tiene un efecto psicoactivo, pero entre sus propiedades está la de reducir potencialmente el riesgo de recaída en el proceso de abandonar la cocaína y al alcohol.
Así lo han demostrado los investigadores en un estudio preclínico que se llevó a cabo en ratas, informa IFLScience.
Usando roedores que habían sido entrenados para autoadministrarse cocaína o alcohol (lo que indicaría un comportamiento adictivo), los investigadores probaron aplicar un gel de CBD en la piel de los animales, una vez al día durante una semana. Luego realizaron una serie de pruebas para ver cómo las ratas reaccionaban ante situaciones estresantes y generadoras de ansiedad, como también conductas impulsivas asociadas con la adicción a las drogas. Observaron si las ratas recaerían y descubrieron que las expuestas al CBD tenían menos probabilidades de experimentar la ansiedad e impulsividad asociadas con la adicción a las drogas.
Aunque en tres días el CBD había desaparecido del cerebro y del plasma de las ratas, cinco meses después, ellas todavía mostraban señales reducidas de las drogas y de la recaída provocada por el estrés asociado a estas.
Los autores dicen que su estudio proporciona una idea de cómo el CBD podría reducir los efectos de la adicción a las drogas y el alcohol.
«La eficacia del cannabinoide [CBD] para reducir el restablecimiento en ratas con alcohol y cocaína -y como se informó anteriormente, heroína- predice el potencial terapéutico para el tratamiento de la adicción en el abuso de varias clases de drogas», dijo el investigador, Friedbert Weiss, en un comunicado. «Los resultados proporcionan una prueba de principio que respalda el potencial del CDB en la prevención de recaídas en dos dimensiones: acciones beneficiosas en varios estados de vulnerabilidad y efectos duraderos con solo un breve tratamiento».
Además, podría informar los posibles beneficios médicos de los cannabinoides no psicoactivos y su potencial uso como recurso terapéutico.
Se ha demostrado que CBD tiene una serie de bondades para la salud. Cuando se aplica por vía tópica, puede aliviar ciertos tipos de dolor y, cuando se ingiere, puede ayudar a reducir los síntomas de los trastornos de ansiedad social generalizada y la depresión.
Los científicos dicen que los beneficios del CBD en la adicción a las drogas podrían estar relacionados con su ayuda en el estrés, la depresión y la ansiedad, factores que pueden desencadenar una recaída en la adicción.
«[Las personas adictas] entran en estados de vulnerabilidad a la recaída, por múltiples razones. Por lo tanto, los efectos observados con el CBD, que al mismo tiempo mejoran varios de estos estados, probablemente sean más efectivos que los tratamientos dirigidos a uno solo», dijo Weiss.
El estudio es preliminar y solo ha demostrado estos resultados en ratones, pero los investigadores esperan poder extender la investigación para comprender más ampliamente los efectos del CBD.