Un proyecto que se desarrollará en el Distrito Escolar del Condado Osceola, en el estado de Florida, Estados Unidos, buscará transformar autobuses escolares que iban a ser desincorporados, en bibliotecas móviles para servir a niños que viven en residencias temporales, muchos de los cuales son puertorriqueños.
El recién designado presidente de la junta escolar del Distrito de Osceola, el puertorriqueño Kelvin Soto, anunció que el proyecto se denomina SMART BUS y comenzará en enero de 2020 con dos autobuses que en estos momentos se encuentran en proceso de reconstrucción y habilitados con computadoras, aire acondicionado, mesas y sillas para acomodar hasta 50 estudiantes cada uno.
“Es un proyecto piloto que, si nos resulta como esperamos, iremos ampliando”, reseñó el diario El Nuevo Día.
“Íbamos a retirar esos buses pero decidimos darle este nuevo uso con la meta de alcanzar a cerca de 500 niños que viven en hoteles y viviendas temporeras que no tienen una computadora para hacer sus tareas. Además, servirá para que los padres puedan ver las comunicaciones de las escuelas y las calificaciones de sus hijos”, explicó.
En principio, el área de prueba serán los hoteles y viviendas temporales que se ubican en la carretera 192 de Kissimmee, explicó. Este corredor vial es una avenida comercial donde abundan comercios y hoteles, y algunos de estos ubicaron a decenas de familias puertorriqueñas desplazadas desde Puerto Rico tras el paso del huracán María en el 2017.
Pero también, allí residen otras familias -muchas hispanas- que por carecer de recursos económicos para comprar o alquilar una residencia adecuada, viven mes a mes en hospederías de bajo costo.
Soto explicó que la idea es que los autobuses se muevan de lunes a viernes y permanezcan durante una hora en cada hospedería o área residencial y así se irán rotando.
La meta es que cada autobús logre servir a 88 estudiantes cada semana. Y aparte del servicio de biblioteca electrónica, a los menores se le ofrecerá alimento que será provisto por el Departamento de Nutrición del Condado, adelantó.
“En un futuro vamos a considerar ampliar el servicio durante los sábados y domingos. Muchos de estos niños son puertorriqueños y sé que este proyecto tendrá un impacto importante”, aseveró.