La historia de David contra Goliat se está escenificando en la actualidad luego de que una pequeña startup se le adelantara a Samsung y comenzara a vender el primer smartphone con pantalla flexible del mercado.
El equipo se llama FlexPai y es comercializado por la compañía Royole, quien lo presentó al mercado la semana pasada y lo puso a la venta por 1.318 dólares, algo más caro que el nuevo iPhone de Apple pero con la ventaja de tener dos dispositivos en uno: un smartphone y una tablet.
El FlexPai cuenta con una versión de Android modificada denominada Water OS, para el uso del equipo.
La innovación del equipo es que no cuenta con cristales, lo que evita que se rompan con el movimiento para desplegarlo o los golpes, ya que dispone de una pantalla impresa con tecnología OLED que permite doblarlo y desdoblarlo hasta 200 mil veces.
La pantalla principal es de 7,8 pulgadas cuando está desplegada, (como una minitablet) y cuenta con dos ranuras para tarjetas SIM que trabajan como dos teléfonos diferentes cuando está doblado. Basta con dar la vuelta al equipo para usar el otro número.
Las contras del equipo es que es algo grueso para el bolsillo, pero minimiza el estar llevando un teléfono y un smartphone. Otra de las desventajas, aparte de su precio, es que será comercializado solo en China a partir de diciembre ya que la empresa no tiene ningún contrato con operadoras fuera de ese país.
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