Ha muerto un gran tipo. Una persona íntegra. Un gran compañero, con quien me tocó vivir días difíciles, derrotas dolorosas y de quien aprendí algunas claves de sobrevivencia indispensables en aquellas duras jornadas.
Un tipo generoso y sensible y, paralelamente, impulsivo, intransigente y “cascarrabias”. Duro en el juicio y la crítica; fraterno y jugado en el compartir la vida cotidiana y enfrentar adversidades.
Ha muerto un colega, periodista “de verdad”, comprometido siempre con la lucha por cambiar la estructura social y política de este país.
Quiso irse y se fue. Este 8 de mayo, en Francia, país en el que residía luego de irse exiliado desde Chile, donde estuvo 8 años en prisión por su compromiso político y militante.
Ha muerto -porque ya no pudo más con esta vida- Ulises Gómez Navarro.
No puedo dejar de despedirme de este “viejo mañoso” con un abrazo apretado, con mi respeto inmenso y con un ¡Hasta pronto, querido compañero!
Por Nelson Rodríguez Sandoval