Por Mauro Salazar
El último ensayo de Rodrigo Karmy Bolton titulado “El fantasma portaliano. Arte de gobierno y república de los cuerpos” (editado en agosto de 2022 por Ediciones Universidad de La Frontera), contiene una viva radiografía de los rasgos autoritarios que han atravesado el devenir de la república desde sus orígenes hasta la actualidad y que tienen a Diego Portales como precursor y símbolo.
En una breve, pero profunda investigación filosófica, política e histórica, el autor concluye con una advertencia, que debe leerse, más bien, como una interpelación. Mientras la revuelta octubrista fue la suspensión parcial de la democracia portaliana de la transición, el portalianismo busca desenfrenadamente su restitución, la cual no opera necesariamente como derrota reaccionaria, sino como neutralización e introyección de lo viejo en lo nuevo.
Efectivamente, vivimos tiempos de restauración, por lo que resulta urgente entender cómo ha operado la pasivización de la actividad popular a lo largo de la historia de Chile. El ensayo ofrece un cuadro coherente y sugerente del imaginario oligárquico nacional, obsesionado por la idea de orden y estabilidad. El portalianismo es presentado no como un conjunto de ideas y doctrinas atribuibles a Diego Portales, sino como un haz de técnicas gubernamentales abiertamente anti populares, articuladas alrededor de una “formación imaginaria cuya función pasa por la docilización de los cuerpos del deseo o, si se quiere, por su gobierno”.
El fantasma portaliano atraviesa los diversos tópicos del pensamiento político de las elites y tiene su sello en los principales símbolos republicanos. Aunque el ensayo tiende a darle potencia de realidad a un concepto confesamente imaginario, el autor es capaz de iluminar hechos fundamentales de nuestra historia, enriqueciendo la comprensión del devenir político nacional y las encrucijadas del presente.
La obra nos sumerge en cada capítulo a un diálogo que parte por las cartas del propio Diego Portales, pasando por las principales definiciones de la historiografía nacional y recurriendo a autores como Nietzsche, Lacan, Foucault, entre otros, para proponer nuevas capas de significado de fenómenos políticos como es la dependencia nacional, el presidencialismo, la pretendida “excepcionalidad chilena”, el autoritarismo estatal, entre muchos otros.
Por Mauro Salazar