Los grandes medios transnacionales y la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) aúllan de dolor porque Ecuador debate una ley que regulará el derecho a la comunicación establecido en la nueva Constitución. El Grupo de Diarios de América (GDA) difundió en todos los grandes diarios de la región que “el periodismo latinoamericano hoy está atravesando uno de sus momentos más complejos”.
El GDA y El Mercurio de Chile aseguran que “eso no guarda relación con la crisis económica mundial ni con el debate sobre el acceso a los diarios en Internet” sino que la “amenaza en este momento proviene -en su mayoría- de leyes restrictivas impulsadas por diferentes gobiernos, con el objetivo de levantar barreras a la libertad de expresión y a la labor fiscalizadora que los medios ejercen sobre los poderes públicos”.
La alusión atañe a Argentina, Ecuador y Venezuela, cuyos poderes públicos recientemente han legislado sobre el rol que deben desempeñar los medios, particularmente los audiovisuales que se apropiaron y lucran del espectro radioeléctrico, un bien público como el agua y los recursos naturales, que debieran pertenecer a todos los ciudadanos. Está claro que lo que es “bueno” para la SIP, CNN, el diario El País, el GDA y todos los grandes medios que se apropiaron en exclusiva del “derecho a informar” no es bueno para los pueblos ni el derecho ciudadano a estar oportuna y verazmente informado.
El proyecto de Ley de Comunicación de Ecuador fue redactado por la Comisión Ocasional de Comunicación Social de la Asamblea Nacional, en un impecable procedimiento democrático. El texto será debatido por el pleno de la Asamblea el próximo 10 de diciembre. Las observaciones que surjan en este primer debate deberán ser incorporadas por la Comisión para un segundo debate y votación que, al parecer, se realizará en febrero del próximo año.
Hace más de medio siglo, un Presidente de Ecuador se quejó que en su país existía una “prensa venal y corrupta”. Y sus dichos hoy conservan plena vigencia, no sólo en su país sino prácticamente en todas las naciones de la región e incluso en el “primer mundo”. El Dr. José María Velasco Ibarra fue elegido Presidente en cinco ocasiones (1934-1935, 1944-1947, 1952-1956, 1960-1961 y 1968-1972). Y aún siendo un político de derecha creía tan poco en los medios que solía decir “Dadme un balcón y seré Presidente”. El Presidente Rafael Correa también ha coincidido en quejarse de los excesos de «una prensa mediocre», «corrupta» o «malintencionada». Y no es el único en América Latina. Por suerte…
Por Ernesto Carmona
Argenpress