El legado de los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos Santiago 2023

Cada una de las inversiones, medallas, crecimiento económico y mejor infraestructura deportiva, no genera que más personas practiquen deporte o actividad física saludable por si solas, debe existir una entidad o un conjunto de entidades públicas y privadas que saquen o maximice todo lo que ha producido este gran mega evento Santiago 2023.

El legado de los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos Santiago 2023

Autor: El Ciudadano

Por Claudio Bossay Salinas

Antes de volver a pensar en organizar un nuevo mega evento deportivo sería bueno “evaluar”.

Ya terminados estos Juegos Panamericanos y Parapanamericanos Santiago 2023, creo que sería bueno realizar una evaluación antes de pensar en una nueva gran organización.

Ante todo, hay que felicitar a todos los y las deportistas participantes, no solo a los y las medallistas por su preparación, esfuerzo y entrega, sino a todos y todas los que nos representaron y se pusieron la roja de Chile, a esos más de 800 deportistas, pero también a sus equipos técnicos, porque sin ellos, nada se pudo haber construido.

Desde los logros deportivos, a nivel Panamericano, igual posición que Lima 2019, 8° lugar, con una medalla de oro menos, pero 12 nuevas medallas de plata, más otras 18 nuevas de bronce, para un aumento total de 29 medallas de 50 a 79.

Desde lo Parapanamericano, gran actuación de nuestro “TeamParaChile”, pasando de un 8° lugar en Lima 2019, a un 6° lugar con 16 medallas de oro, y un total de 51 medallas, 17 más que en Lima desplazando a potencias tales como Cuba y Canadá.

A todo esto, hay que sumar las mejores marcas/registros de variados deportistas, y por supuesto para otros muchos una gran experiencia, que de seguro los marcará en su futura carrera deportiva.

Desde lo financiero, según el estudio encomendado por la propia Corporación Santiago 2023, a la empresa internacional Deloitte, ya antes de los Juegos proyectaban que por “USD 1 gastado en los Juegos resulta en un efecto de USD 1,18 en términos del PIB de la economía chilena” y “6.448 puestos de trabajo anualizados”.

Ya cerrando solo los Juegos Panamericanos (10/11), el Gerente Comercial de la Corporación Santiago 2023, declaró al Diario Financiero, que ya se habían generado más de 5 mil millones de pesos por concepto de entradas, 2 mil 500 millones, gracias a “FIU” y otros 3 mil 700 millones de pesos producto de patrocinadores, ósea más de 11 mil 400 millones de pesos.  Lamentablemente estos recursos no van todos directamente a la organización, sino que son licitaciones, por ejemplo, solo un 20% de los tickets llega a PANAM SPORT, “FIU”, solo nos aporta un 10% a la Corporación Santiago 2023, y en propias palabras de Gerente Comercial de la Corporación estos recursos “están yendo a parchar lo que no cubrió la Dirección de Presupuestos”.

El “Legado” en la infraestructura pareciera lo más evidente, con el “Parque Deportivo Estadio Nacional”, con infraestructura de nivel mundial, sumado a otras instalaciones remodeladas y nuevas para estos Juegos Santiago 2023, más de 200 mil millones de pesos se invirtieron.

Pero, cada una de estas inversiones, medallas, crecimiento económico y mejor infraestructura deportiva, no genera que más personas practiquen deporte o actividad física saludable por si solas, debe existir una entidad o un conjunto de entidades públicas y privadas que saquen o maximice todo lo que ha producido este gran mega evento Santiago 2023.

Según la experiencia internacional, por ejemplo, en países desarrollados como Reino Unido, ya tienen claro que “El uso y abuso de funciones por parte de regímenes políticos de todas las tendencias ha creado expectativas en espiral de que el deporte puede ofrecer casi cualquier beneficio personal y social a un costo relativamente bajo….lo que ha cuestionado la naturaleza inherentemente buena del deporte y por implicancia de los propios JJOO”, y que por ende la organización de un JJOO, “no es un método eficaz y rentable para lograr […] un aumento sostenido de la participación masiva”.

Para países más periféricos, como Chile, tenemos el caso de Brasil que organizó 3 mega eventos deportivos entre 2013 y 2016, donde queda claro que la organización de un mega evento deportivo no garantiza por sí solo un legado positivo y se han convertido, según los investigadores del área, solo en una “prueba mediante la cual el país necesita demostrar que pertenece al núcleo del sistema político internacional”.  En resumen, luego de un análisis exhaustivo del financiamiento y los impactos de diversos mega eventos realizados en Brasil, los investigadores declaran que, en general, para los mega eventos deportivos, se sobre estima los beneficios del legado y los impactos sociales positivos, y se minimizan los costos, los sobrecostos y los impactos sociales negativos o no deseados.

Para finalizar, y antes de volver a pensar en organizar un mega evento deportivo, por favor, autoridades políticas y del deporte nacional, que las decisiones para la organización, ejecución y legado de un próximo evento deportivo sean basadas en el conocimiento científico, y no solo en demostrar que podemos construir u organizar un mega evento deportivo de forma adecuada.

Claudio Bossay Salinas

Sociólogo, U de Chile.

Magíster en Gestión Deportiva. 

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