La recaudación de cotizaciones obligatorias en el sistema AFP promedió cerca de mil millones de dólares mensuales, 12 mil millones de dólares en los últimos 12 meses a diciembre 2021, y crecieron más de 10 por ciento en ese período (IMACEI-CENDA).
Dicha suma es más del doble del costo de las pensiones pagadas por el sistema AFP en su conjunto, incluyendo las pagadas por compañías de seguros, el que sumó poco más de 5 mil millones de dólares, y creció apenas 0,7 por ciento en el mismo período.
A las cotizaciones recaudadas hay que agregar los subsidios fiscales directos al pago de pensiones AFP, bonos de reconocimiento y aportes previsionales solidarios, los que sumaron poco más de dos mil millones de dólares que cubrieron cerca de un 40 por ciento del costo de las pensiones pagadas por el sistema AFP, y crecieron en un 15,7 por ciento, en el mismo período.
De este modo, el sistema AFP se apropió un excedente corriente neto, es decir, cotizaciones obligatorias recaudadas y subsidios directos al pago de pensiones AFP, menos el costo de éstas, que suma poco más de 8.200 millones de dólares y creció un 19,4 por ciento, en ese período.
En otras palabras, las personas activas afiliadas al sistema de AFP le traspasaron forzosamente una parte de sus salarios que podría haber más que duplicado las pensiones de sus padres y abuelas, y el fisco le aportó adicionalmente subsidios directos que cubrieron un 40 por ciento de éstas.
El excedente corriente neto de cotizaciones y subsidios así traspasados equivale a más del 10 por ciento de la masa de salarios imponibles y a más de 3 por ciento del producto interno bruto (PIB), en los últimos 12 meses a diciembre del 2021.
Es dinero escamoteado a las pensiones corrientes, que podría más que duplicar su monto ahorrando al mismo tiempo al fisco los subsidios que hoy aporta y dejando un superávit de miles de millones de dólares a su favor. En cambio, ese dinero va a financiar comisiones y primas del sistema AFP y negocios de un reducido grupo de grandes empresarios.
Así ha sucedido en medio de la pandemia. Así ha venido sucediendo, mes tras mes, año tras año, desde la dictación del DL 3.500 que creó el sistema AFP en 1981. En eso consiste el abusivo sistema de ahorro forzoso AFP: desviar el dinero de las cotizaciones obligatorias a financiar negocios de empresarios a costa de millones de personas jubiladas y del fisco.
Manuel Riesco
CENDA