La batalla por los doblajes

Los resultados municipales modificaron el escenario parlamentario para el próximo año

La batalla por los doblajes

Autor: LLaguno

Los resultados municipales modificaron el escenario parlamentario para el próximo año. Los favorables resultados para la post-Concertación que en concejales gana al oficialismo por 16 puntos porcentuales (49,5% contra 33,1%) y en alcaldes por 5,6 puntos porcentuales (43,1% contra 37,5%) son la primera señal de lo que podría ocurrir en términos electorales en las próximas parlamentarias.

Si a este hecho político agregamos la baja aprobación del Gobierno, que la parlamentaria coincide con la presidencial (lo que implica subir la votación de la coalición que gana el ejecutivo) y que el oficialismo va a realizar una campaña muy debilitada –por efecto de una extenuante y desgastadora primaria-, nos encontramos en un escenario muy favorable para la post-Concertación. Los apetitos se abrieron y se ha comenzado a hablar del “parlamento para Bachelet” y de la “batalla por los doblajes”.

El panorama senatorial muestra que de los 38 senadores en ejercicio la Concertación tiene 20 senadores (9 DC, 5 PS, 4 PPD, 1 RSD y un MAS) y el oficialismo 17 (8 UDI y 9 RN –incluido el ahora independiente Carlos Cantero-). El escaño que falta para completar la Corporación es el del independiente fuera de pacto, Carlos Bianchi que representa a la circunscripción de Magallanes y que se ha definido –en alguna oportunidad- como “químicamente puro”.

La elección senatorial del próximo año debe elegir 20 senadores en diez circunscripciones; dos en las Regiones de Antofagasta, Coquimbo, O´Higgins, Los Ríos, Los Lagos y Magallanes y cuatro en la Metropolitana y en la Octava. De los 18 senadores en ejercicio que no ponen en riesgo su escaño –y que, por tanto, van a seguir en el Senado– corresponden nueve para la Concertación (4 DC, 3 PPD y 2 PS) y nueve para el oficialismo (6 RN y 3 UDI). Este es el piso para el nuevo Senado.

¿Qué implican esta distribución de escaños a defender y conquistar?  En primer lugar, se observa que  a pesar de las condiciones favorables que se abren para la post-Concertación, es justamente este sector el que más riesgo asume. De hecho, de los 20 escaños en competencia tiene que defender once cupos y un doblaje. A su vez, el oficialismo tiene que defender sólo ocho asientos. El escaño restante corresponde al senador Bianchi que está en la disyuntiva de competir fuera de pacto o en el cupo de RN.

En segundo lugar, la distribución de las veinte defensas corresponde a 5 DC, 5 UDI, 4 PS –incluido el cupo de Navarro-, 3 RN, 1 PPD y un radical. Según esto, es la UDI, la DC, el PS  y los radicales los que más riesgo asumen. Los que menos arriesgan son RN y el PPD.

La UDI  es el partido que más arriesga desde el punto de vista cuantitativo y el que más perdió desde el punto de vista cualitativo. En la actualidad tiene ocho senadores: Orpis, Uriarte, Novoa, Von Baer, García-Huidobro, Coloma, Larraín y Pérez Varela-. En la próxima elección tiene que defender cinco escaños. Independientemente de que puede retener los cinco cupos ya perdió a Longueira, Matthei y Chadwick. Un dato no menor para la próxima legislatura. Los otros dos cupos los defiende Pérez Varela y Novoa. Mantienen escaño: Orpis, Coloma y Larraín.

De modo preliminar, el escenario no se ve fácil para el gremialismo; puede bajar de ocho a cinco senadores. Puede perder el cupo de Coquimbo y los dos de la Metropolitana. Del mismo modo, busca instalar –lo que no es fácil si hay unidad opositora- a la Van Rysselberghe y a Manuel Rojas en Antofagasta.

La DC, es otro partido que arriesga importantes cuotas de poder senatorial. De los nueve senadores que tiene debe defender cinco cupos. Mantiene: Ignacio y Patricio Walker, Zaldívar y Ximena Rincón.  Los cinco que compiten: Pizarro, Alvear, Sabag, Ruiz-Esquide y Frei. Lo más complejo es mantener el cupo de Concepción Costa. Los otros casos, tienen buen pronóstico dependiendo de la potencia que puede tener o no el compañero de lista. En esa dirección la pareja Alvear-Montes, Pizarro-Insulza complica –en alguna medida- la opción DC. Falta aún, conocer y tener certezas de si va o no Frei a la reelección. Es altamente probable que la falange mantenga su representación senatorial. Si no lo hace, su baja será leve. Es más, la posibilidad de competir en la Segunda Región con Pedro Araya abre significativas posibilidades no sólo de recuperar el cupo perdido en el 2005, sino también de aumentar su representación.

En la actualidad los socialistas tienen seis senadores –incluyendo a Navarro-. Mantiene dos: Allende y Rossi. Defienden cuatro: Letelier, Navarro, Escalona y Muñoz. De acuerdo al liderazgo de cada senador y a la realdad político-electoral de cada región no sólo es probable que puedan defender con éxito esos cuatro cupos, sino también que logren aumentar su representación entre uno y dos escaños. Aumentar sus bancada senatorial, implica –necesariamente- la baja de sus socios.

Los radicales también arriesgan en la próxima senatorial. Es altamente probable que José Antonio Gómez no vaya a la reelección. En ese escenario su cupo lo puede ocupar el diputado  Espinosa. La coyuntura de la Región de Antofagasta tiene dinámicas bien específicas por lo que no sólo hay posibilidades de doblaje –no muy altas-, sino también que la UDI le gana a RN el cupo o que se imponga un independiente fuera de pacto. Los resultados de la última municipal y el factor Cantero-Hernando hacen que en el escenario electoral de esta circunscripción genere más dudas que certezas.

El PPD y RN son los partidos que menos arriesgan en las próximas parlamentarias. RN en el actual Senado ocupa nueve escaños –considerando a Cantero-. De ellos, mantiene cupo: Prokurica, Lily Pérez, Chahuán, Espina, García Ruminot y Horvath. Tres son los cupos que arriesga: Cantero –hoy independiente-, Carlos Larraín y Carlos Kuschel. Es altamente probable que el partido de la calle Antonio Varas mantenga su representación en cantidad y calidad. La incógnita es lo que suceda en Antofagasta.

El PPD tiene cuatro senadores. Mantiene tres –Lagos Weber, Quintana, Tuma– y arriesga uno –Girardi-. En este escenario, es altamente probable que, a lo menos, mantenga su representación. Es, por tanto, el partido que menos arriesga y el que más puede ganar. Del mismo modo, es probable que no tenga mucho que exigir y presionar a la hora de armar la plantilla senatorial de la post-Concertación.

¿Dónde se puede doblar? El objetivo político electoral de la post-Concertación es lograr 23 senadores. El próximo Senado parte con un empate a nueve entre el oficialismo y la Concertación. La elección senatorial que se abre pone a disposición 20 escaños.

En función de la historia senatorial de cada Región, de la última senatorial, de los resultados municipales de octubre, de la dinámica propia de cada espacio electoral y de la coyuntura socio-política del país se observa que la posibilidad de doblaje es alta en tres circunscripciones: Coquimbo, Metropolitana Poniente, y Bio-Bio Costa. A su vez, la posibilidad de doblaje es baja –casi nula- en cuatro circunscripciones: Metropolitana Oriente, Bio-Bio Interior, Los Ríos y Los Lagos. Finalmente, la posibilidad de doblaje es media en tres circunscripciones: Antofagasta, O´Higgins y Magallanes.

El hecho de que no exista doblaje en cuatro circunscripciones conduce a que el Senado 2014 tenga, a lo menos, 13 escaños para cada fuerza duopólica. La correlación de fuerzas indica, a su vez, que la post-Concertación aumenta a 19 su representación al mantener, a lo menos, un escaño por cada una de las seis circunscripciones restantes. En este escenario, por tanto, llegamos a 32 senadores: 13 para el oficialismo y 19 para la oposición actual.

Quedan seis cupos en competencia. De estos seis, la post-Concertación necesita cuatro para lograr el objetivo de los 23 senadores. ¿Dónde lograrlos: Coquimbo, Metropolitana Poniente, Bio-Bio Costa, Antofagasta, O´Higgins o Magallanes?

La probabilidad más alta es que se mantenga el doblaje de Concepción. Los requisitos mínimos para este objetivo son: unidad opositora y una dupla competitiva con Navarro y una figura local de la DC. Gutemberg Martínez es un error mayúsculo. Si se mantiene el doblaje, la correlación de fuerza senatorial sería 20 a 13 a favor de la post-Concertación. ¿Cómo será el rendimiento electoral de la Jacqueline?

Quedan cinco cupos en competencia. En este terreno puede pasar cualquier cosa. De hecho, se puede configurar el escenario de 25 contra 13 como el de 20 contra 18. Los resultados finales –si hay o no doblaje- van a depender del tipo de dupla que se arme, del número de listas en competencia y de que no surjan independientes fuera de pacto competitivos –lo que puede ocurrir en Magallanes-.

Independientemente de lo que suceda, el Senado que se inaugura en marzo de 2014 será distinto –muy distinto- al actual; a) los tonelajes de la UDI no van a estar –Longuiera, Matthei y Chadwick y la permanencia de Novoa es incierta-, b) la presencia de RN no sólo será probablemente mayor en número, sino también estará dominada por los liberales y c) la post-Concertación aumentará su representación de 20 a 21 –a lo menos-. La batalla por los doblajes ya está en marcha. Se ve bien aspectada; a pesar de la incertidumbre que genera la inscripción obligatoria –o automática- y el voto voluntario.

Por González Llaguno


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