La sorprendente y transformadora propuesta de la Aces

El lunes 12 fue la presentación pública de la propuesta de la Aces, que ya está circulando en la web

La sorprendente y transformadora propuesta de la Aces

Autor: Cristobal Cornejo

El lunes 12 fue la presentación pública de la propuesta de la Aces, que ya está circulando en la web. Su tenor rompe abruptamente con las vacilaciones y negociaciones que hasta ahora no han dado en nada, pues creo que no necesitan ser aprobadas por las instituciones.

Tres son los ejes de la propuesta, que se desglosa de la siguiente manera:

I Sistema nacional de educación estatal, gratuita, de excelencia y con control comunitario.

Sistema educativo nacional articulado desde la educación parvularia a la educación técnica y universitaria. Con énfasis en la articulación y fortalecimiento de la educación técnica.

Sistema educativo gratuito financiado por el Estado.

Sistema educativo de excelencia integral e igualitaria.

Sistema educativo descentralizado, participativo y con control comunitario.

II. Tarjeta Nacional Estudiantil (TNE) gratuita los 365 días del año.

III. Reconstrucción de colegios, liceos y escuelas estatales sin privatización.

Análisis:

Es la única propuesta que conocemos que toma el toro por las astas:

Un sistema nacional articulado de abajo hacia arriba. Articulado implica imbricación, encaje, retroalimentación, o sea , no será cada esfera independiente de las anteriores o posteriores. Eso debería impedir que los hijos deban desarraigarse de sus familias y territorios yendo a estudiar a otra comuna o a otra región

Toda la cadena es financiada por el estado.

Sistema integral, o sea no en parcelas, e igualitario, o sea, la misma oportunidad para todos independiente de su status o nivel económico, sexo u origen, lo que va a  resultar también en que todas las fases educativas estarán abiertas no sólo para hijos de árabes o italianos, sino también para hijos de peruanos, colombianos y todos.

Sistema descentralizado, participativo y con control comunitario.

Esta es tal vez la más importante propuesta del punto de vista metodológico, ya que permite que cada región o identidad territorial determine los contenidos, programas y metodologías a aplicar, que no podrán venir de arriba, sino de abajo, de forma participativa, lo que no se agota ahí, sino que queda bajo la supervisión de la comunidad, lo que debe entenderse como la comunidad inmediata, esto es, los vecinos del barrio y los apoderados, que se supone que son locales, ya que sería chocante participar en los programas de la escuela y mandar al hijo a otra región.

Así la educación vuelve al vientre materno, regresa a su territorio y mundo de la vida de donde fue sacado manu militari a comienzos de los 1800. Se acaba con la hegemonía, o mejor el hegemonismo de la centralización y se valoriza el espacio de vida de los educandos, espacio donde los actores tienen  el pleno derecho de decidir como quieren que se eduquen sus descendientes, que libros leer y cual es su reproducción cultural. También podrán evaluar ellos a los profesores y mandar a la universidad a los jóvenes que estudiarán pedagogía para aprender a educar en las escuelas locales. La PSU ya no será necesaria, pues el sistema debe asegurar vacantes para todas las carreras en cada territorio histórico-identitario.

No hay ninguna duda que esa educación podrá también educar al personal de salud que necesita la región, a los ingenieros, constructores y demás, desde la óptica de la articulación de los niveles y la descentralización.

Sin duda eso es más político que llamar a la nacionalización del cobre sin proponer nada para el ámbito pedagógico. Eso es más político que levantar las candidaturas a diputada y alcalde de algunos dirigentes estudiantiles, a quienes ha llegado la hora de quitarles el micrófono. Es mucho más político que las propuestas de sumarse a otros actores sociales y acumular fuerzas de “movimientos” falsamente autónomos para el asalto al aparato del estado para dirigir desde allá arriba una educación centralizada en eterna batalla de los paradigmas, ideologías, corrientes y partidos unos contra los otros. El trabajo de base para cada localidad propuesto por la Aces es un tapabocas a todos los políticos “tradicionales”, pues la idea no es luchar para que el parlamento se mate de la risa, sino para imponerlo de facto con la unidad y fuerza de los vecinos. Eso recuerda las dinámicas actuales del Congreso de los Pueblos en Colombia que están haciendo sus propias reglas para ejecutarlas en la práctica de defensa y control territorial.

Por Profesor J


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