Por Florencia Lagos Neumann – La Habana
“La prensa de América Latina debiera estar en posesión de medios que le permitan conocer la verdad y no ser víctimas de la mentira”.
Fidel Castro
Habían pasado dos semanas después del triunfo de la Revolución cubana cuando el 15 de enero de 1959 un grupo de parlamentarios estadounidenses se declararon contrarios a los juicios y castigos de criminales de guerra batistianos y solicitaron al Departamento de Estado intervenir. Wayne Hays, congresista republicano, solicitó tomar medidas contra la Isla: La rebaja de la Cuota Azucarera, el Embargo Comercial, y si era necesario una invasión con el envío de tropas.
La campaña fue asumida por las agencias de noticias que predominaban en la esfera internacional. La United Press International (UPI) y la Associated Press (AP) en su conjunto contaban con 261 corresponsalías en EE. UU. y 167 en el extranjero, así como miles de reporteros radicados en América Latina.
En respuesta, el líder histórico Fidel Castro, los días 21 y 22 de enero de 1959 en La Habana, convocó a una masiva conferencia de prensa que reunió a más de 400 periodistas nacionales y extranjeros, donde el recién asumido gobierno expuso los cambios radicales que vivía el país.
Con el respaldo de las principales instituciones periodísticas existentes, Colegio de Periodistas y la Asociación de Reporteros se dio inició al encuentro cuyo objetivo fue develar la campaña contra la naciente Revolución sobre los juicios y ajusticiamiento de connotados torturadores y asesinos de la dictadura batistiana. La acción fue bautizada como “Operación Verdad”.
“Con esa premisa, fueron el revolucionario Ernesto Che Guevara y los periodistas Jorge Ricardo Masetti y Carlos María Gutiérrez, quienes concibieron la idea y organizaron una agencia que llevara información como alternativa a las grandes agencias cablegráficas internacionales”, destaca el portal de Prensa Latina (PL).
El 16 de junio de 1959 la agencia de noticias publicó su primer cable noticioso en Nueva York, iniciando el engorroso camino de romper con el cerco informativo que establecía el monopolio mediático. Así nació PL, su plantilla inicial fue de 20 periodistas, además de traductores y técnicos. Hoy la agencia cuenta con corresponsalías en 40 países y miles de receptores en más de 60 países.
Un promedio de 400 despachos informativos llegan hasta el “cast mundial” contando la realidad de los pueblos y adentrándose en esas historias que las transnacionales de la comunicación no cuentan.
“Los corresponsales de Prensa Latina han estado en zonas de guerra, en catástrofes naturales, en complejos escenarios políticos y han llevado a los lectores los hechos, con la objetividad que exige el periodismo, pero también con la pasión que implica vivir momentos únicos que cambian el curso de la historia del mundo”, señala el presidente de Prensa Latina, Luis Enrique González.
Los periodistas que integran la agencia cuentan con herramientas tecnológicas diversas, sin embargo, siguen pagando los costos que significa defender la verdad ante el pensamiento predominante que alimentan las agencias de noticias y cadenas de televisión hegemónicas.
Actualmente vivimos una agresión mediática constante. La creación de noticias falsas “fake news”, construcción de ficciones que repetidas millones de veces en las redes constituyen una realidad para el lector.
La tergiversación de las realidades es una herramienta utilizada para derrocar gobiernos legítimos, crear campañas contra políticos progresistas e instalar un adoctrinamiento a la población para convencerle de adorar a líderes mesiánicos y neoliberales.
PL celebra 65 años y para ello entre los días 21 y 22 de enero del presente año dará cita en La Habana a destacados periodistas y Ministros de Comunicación de más de 30 países con el objetivo de relanzar una nueva “Misión Verdad” por la información veraz y oportuna.
Considerando lo anterior, Luis Enrique González, presidente de Prensa Latina, destaca que: “La vigencia de Operación Verdad es una realidad y una acción más necesaria que nunca en la actualidad”.