El movimiento estudiantil comenzó a dinamizar la política, e incluso ayudó a dar movilidad a los movimientos sociales, haciendo claros cuestionamientos a los espacios de poder político que tomaban decisiones a espaldas de la ciudadanía y solo para la élite política y empresarial que gobierna este país hace más de 40 años.
Aquel movimiento comenzó a mover los cimientos del modelo económico neoliberal, cuestionando un modelo educativo que sólo crea más desigualdad, segregación e incluso más pobres, ahora con educación.
Un modelo educativo que les permite a ellos seguir, desde las cúpulas de poder, gobernando para los dueños del poder y la riqueza. Un bloque en el poder, que ha permitido la política de los consensos, poniéndose de acuerdo un pequeño sector en desmedro de las mayorías, que siguen con bajos sueldos y precariedad laboral, sin derecho a la vivienda, depredando nuestros recursos naturales, sin educación de calidad para la gran mayoría de nuestro pueblo.
En el Chile actual, con graves casos de corrupción en la política, los movimientos sociales tienen el gran desafío de trabajar para sacar a todas y todos aquellos corruptos de la política, y hacer de esta un verdadero ejercicio participativo. Que no sigan decidiendo lo que Chile necesita.
¿Acaso sabrán ellos lo que necesitamos?
NO, estos políticos solo responden al empresariado y sus bolsillos llenos a costa del robo, saqueo y sufrimiento de la gente.
La gente del Norte, con una catástrofe que no solo fue por la naturaleza; en el Sur, con la quema de reservas naturales ancestrales de nuestro PEWEN y así podríamos enumerar un sin fin de territorios y comunidades que siguen a la voluntad de esta casta política.
{destacado-1} Cuando estamos presenciando a cada momento y a cada hora una nueva arista en los casos de corrupción, es menor el asombro de la ciudadanía con esto. No faltan aquellos que defienden lo indefendible y acusan de maniobras y tratar de enlodar a algunos “honorables”. Mientras otros dicen que nadie es culpable hasta que se demuestre lo contrario.
No nos hagan reír señores, esto llego a ribetes insospechados, donde de una u otra manera la ciudadanía enfrenta cara a cara a las y los mañosos; claro que a aquellos que podemos llegar a ver y alcanzar.
Hoy, ese movimiento estudiantil que nos reencantó, que nos revitalizó, que ayudó para quizá, dar pasitos mas largos desde el mundo social político, está aquí.
Ese movimiento que hoy se organiza contra el bloque el bloque en el poder, que este próximo 16 de abril nos convoca a marchar en conjunto.
Porque la educación es una herramienta fundamental para el crecimiento y participación de nuestro pueblo. Porque “un pueblo ilustrado es poderoso”.
La educación debe ser gratuita e igual para todas y todos, con acceso garantizado. Pensamos que la Escuela Militar y el resto de las escuelas matrices también son instituciones de este tipo, y que deben ser abiertas a los hijos e hijas del pueblo.
Por esto y por más, el 16 nos vemos en la calle, presionando para que las reformas sean estructurales y reales, no maquillajes que solo seguirán beneficiando a aquellos que intentan seguir apernados en los sitiales de poder.
Ahí nos veremos las caras aquellas y aquellos que decimos ¡Que los corruptos no decidan lo que chile necesita!
A ejercer nuestros derechos en cada uno de los espacios de organización y articulación para cambiar Chile y su destino, destino que tenemos en nuestras manos, destino que hemos ido construyendo a lo largo de nuestra historia como pueblo.
Tenemos una gran oportunidad y desafío para el periodo, debemos estar a la altura de los cambios que debemos generar. A desafiar a los poderosos, a construir mayorías que produzcan los cambios necesarios y seguir construyendo organización desde todos y cada uno de los espacios.
Estamos invitados a ser los protagonistas de esta historia, que se construye con mujeres y hombres honestos. Estamos convencidas que la herramienta de lucha para vencer es la organización, la formación, la disciplina y la lucha. ¡La disposición para avanzar!