Fotografía: senadores Jorge Soria, Fidel Espinoza, Iván Moreira y Alejandro Kusanovic,
ausentes en la sesión donde se discutiría la nulidad de la Ley de Pesca.
Otro episodio de vergüenza nacional. Este miércoles, en el Congreso, se vivió una jornada que será recordada por los ciudadanos y ciudadanas de Chile debido a su carácter antirrepublicano y de espaldas a la ciudadanía… otra vez.
Esta vez la polémica se desarrolló en el Senado, en la Comisión de Intereses Marítimos, Pesca y Acuicultura. La instancia, compuesta por cinco senadores, debía empezar a discutir la anulación de la Ley de Pesca, también conocida como la «Ley Longueira». Sin embargo, esta nunca llegó a realizarse.
Los integrantes de dicha comisión son los senadores Fidel Espinoza (PS), Alejandro Kusanovic (IND-RN), Iván Moreira (UDI), Jorge Soria (IND-PPD) y Daniel Nuñez (PC), quien la preside. Ayer, cuatro de esos cinco senadores decidieron no presentarse a la instancia, por lo que la sesión tuvo que ser cancelada por falta de quórum.
El presidente de la comisión, Daniel Nuñez, fue el único en llegar a la instancia, y quien se encargó de transparentar la situación a la ciudadanía y la prensa a través de Twitter, tachando la actitud de los senadores de «impresentable». A su vez hizo un llamado al Senado a reivindicarse «frente al poder del dinero».
El acontecimiento causó furia y múltiples réplicas a través de redes sociales. Pero sobretodo, puso en la palestra nuevamente la deslegitimación que sufre el Senado como institución política. Y las posibilidades que abre la propuesta constitucional para articular nuevas instituciones más conectadas con los territorios y su gente, y por tal con el verdadero mandato popular.
En la sección de disposiciones transitorias de la propuesta constitucional, se explicita el término definitivo del Senado. La disposición decimotercera, inciso dos, señala que «la legislatura ordinaria iniciada el 11 de marzo de 2022 terminará el 11 de marzo de 2026. Las y los actuales integrantes del Senado terminarán sus mandatos el 11 de marzo de 2026«.
En caso de ganar el Apruebo en el próximo plebiscito constitucional, el Senado, uno de los bastiones celosamente reservados para la casta política de siempre, llegaría a su fin, abriéndose las puertas a una representación política más democrática. La Cámara de las Regiones, paritaria, plurinacional y representativa de los territorios se levanta como una importante sustituta. De la que se espera mucho más compromiso con las demandas ciudadanas y menos dependencia del poder de los grandes grupos económicos.
Sin ir más lejos, el mismísimo Iván Moreira, uno de los senadores ausentes en la sesión, fue investigado hace varios años ya, en el contexto del Caso Corpesca y la génesis de la cuestionada Ley de Pesca. Esto por unos correos intercambiados con el entonces director de Corpesca, Roberto Angelini, perteneciente a una de las famosas «7 familias» dueñas del mar en Chile. ¿Qué se puede esperar de este tipo de senadores, tan amigos de los dueños del país? ¿Es siquiera motivo de sorpresa la ausencia de Moreira y similares, en la primera sesión donde se empezaría a discutir la nulidad de la Ley de Pesca que ellos mismos ayudaron a levantar?
A buen entendedor pocas palabras, y así lo hicieron ver múltiples ciudadanos y figuras públicas a través de redes. A continuación algunas de las reacciones que generó esta afrenta legislativa: