En el año de 1968, el escritor Juan Rulfo firmó una protesta pública, signó un manifiesto dirigido a la opinión pública y se sumó a otro manifiesto dirigido al presidente de la República. Así fue como inició el expediente que el Estado Mexicano abrió en contra de uno de los escritores más grandes de todos los tiempos.
El expediente en contra de Juan Rulfo fue hecho por la Dirección Federal de Seguridad (DFS) y actualmente se encuentra en el Archivo General de la Nación. En él se constata que el autor de Pedro Páramo fue seguido de 1959 a 1982. Además, también se vigiló su apoyo al movimiento estudiantil de 1968.
Por si fuera poco, la DFS espió las reuniones que Juan Rulfo tuvo en los años 70 y 80 con colegas de México y el extranjero. Por ejemplo, existe un reporte fechado el 24 de agosto de 1968 en el que se da cuenta de los pormenores de una reunión en el auditorio Justo Sierra de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM. Esto en pleno movimiento estudiantil.
En dicha reunión participaron, además de Juan Rulfo, José Revueltas, Carlos Monsiváis y Eduardo Lizalde. Juntos integraron una comisión donde aprobaron sabotear las Olimpiadas Culturales. Éste se trataba de un espacio que impulsaba el gobierno de Díaz Ordaz para promover los Juegos Olímpicos del 68.
También existe un reporte sobre la aparición de pintas exigiendo libertad para los presos políticos en planteles de la UNAM y el IPN. Se repartían volantes de escritores, como Rulfo, en los que solidarizaban con los detenidos tras la represión del 2 de octubre.
Dicho manifiesto de solidaridad estaba firmado por Juan Rulfo, José Emilio Pacheco, José Agustín y Vicente Leñero. Además de los pintores David Alfaro Siqueiros y José Luis Cuevas.
Foto: Agencias
Información: El Informador
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