El árbitro chileno Eduardo Gamboa fue sancionado con 18 semanas de suspensión por la Comisión Arbitral de la Federación local, mientras que sus colaboradores fueron castigados por 12 semanas tras una polémica tanda de penales entre el Vallenar y el Melipilla, que luchaban por subir a Segunda división.
La sanción a Gamboa arrancó el pasado 19 de diciembre, día del escándalo, y se prolongará hasta el 1 de mayo del presente año. El castigo fue aplicado al árbitro y sus asistentes, Carlos Venegas, Juan Serrano y Ángelo Hermosilla, por el grave error cometido en uno de los penales de Vallenar, en el que no empleó correctamente el reglamento, lo que después derivó en la reclamación de Melipilla.
El colegiado no aplicó una regla implementada en junio de este año por la FIFA por la que si un ejecutor y un guardameta cometen un error al mismo tiempo el lanzamiento queda anulado en la tanda y se debe pasar al siguiente disparo.
La situación se dio en el partido jugado el pasado 19 de diciembre y en el que, tras la tanda de penales, Deportes Vallenar subió. Sin embargo, la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) ordenó que se repitiera la tanda de penaltis, pero Vallenar no compareció el pasado 27 de diciembre a esa inédita repetición, por lo que el Deportes Melipilla ascendió a la Primera B, la segunda categoría del fútbol chileno.
Los dirigentes de Vallenar recurrieron al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) para revertir la repetición de los penaltis.