Uno tiene el apoyo de la directiva, el otro está en entredicho pese a que fue confirmado.
La realidad de Nelson Acosta en Deportes Iquique y Emiliano Astorga en Santiago Wanderers dista bastante pero tiene un denominador común. Mientras el calvo ex adiestrador de la selección chilena en el mundial de Francia ’98 pasó de ser el salvador del equipo en el torneo pasado a un entrenador cuestionado transversalmente, Astorga suma molestia en la fanaticada caturra tras la eliminación en Copa Sudamericana.
Nelson Acosta se reunió últimamente con sus jugadores tras una nueva derrota, una estrepitosa en calidad de local ante O’Higgins. Y fue claro con ellos. «Yo no voy a renunciar, ustedes tienen que tener autocrítica», les dijo en una reunión de urgencia ante la cada vez más fuerte voz de que será cesado de su cargo, algo que podría tener solución dentro de esta semana, ya sea con un ultimátum de la directiva celeste o con la decisión de despedirlo.
Caso distinto es el de Astorga, que tras una paupérrima actuación en Asunción -con dos penales absurdos al inicio de cada tiempo- ya está siendo cuestionado, por la importante inversión que se hizo para traer refuerzos de nivel y por perder el clásico porteño ante Everton en Copa Chile. En caso de perder uno o dos partidos más, Astorga podría dimitir en un ambiente tenso pese a que la directiva anuncia que no pretende cuestionar su proceso.