Se dijo que era una queja hacia la dirigencia, un supuesto mensaje para que quienes están interesados en ficharlo hicieran sus ofertas… Se especuló de todo luego de que Lionel Messi celebró su gol ante el Celta de una forma más que curiosa. Tras marcar el 1-0, el argentino miró a la tribuna del Camp Nou señalando con su dedo índice y ha hecho el gesto de llamar por teléfono con su mano derecha, cerrando los tres dedos centrales y manteniendo abiertos el pulgar y el meñique. Justo después, movió su mano de arriba a abajo un par de veces.
El crack lo ha hecho una segunda vez mientras regresaba al campo del Barça antes del saque de centro del Celta. Y por último, por tercera vez, ya en el centro del campo. En los tres casos, su gesto era serio. Una celebración inusual y que ha llamado la atención, pues no suele variar demasiado su liturgia habitual, que es la de señalar al cielo tras el gol en homenaje a su abuela Celia, ya fallecida. Hoy, antes de hacer los gestos del teléfono, también se acordó de ella.
Tras el partido, y viendo la repercusión que estaba teniendo el gesto de Messi en las redes sociales, le preguntaron internamente para quién iba el mensaje. Messi explicó que su gesto lo dirigió a un sobrino, al que ha estado llamando varias veces durante el día para felicitarle por una celebración familiar y que no le ha contestó el teléfono. En el Camp Nou estaba su hermano Rodrigo con sus hijos. Misterio resuelto. Eso pasa cuando tu tío es famoso y te avisa delante de los televisores de todo el mundo que ojalá le contestes el teléfono…