Durante los últimos 30 años y desde la llegada del Internet la concepción del deporte ha cambiado drásticamente y pasó a ser, más allá de una práctica sana, un fenómeno social consumible y un sector económicamente dinámico y activo. Sin embargo, en tiempos de pandemia muchos se preguntan si después de la cuarentena por el coronavirus los deportes seguirán moviendo masas.
En un intento por dar respuesta a esta interrogante que está en el tapete de muchos empresarios, dueños de franquicias y marcas afines al deporte, además de millones de fanáticos de todos los deportes en el planeta que se muestran optimistas sobre la perspectiva de que la NBA, la NHL, la MLB y Ligas de fútbol regresen pronto, incluso antes que finalice el año, autoridades en el área plantean tener juegos a puertas cerradas.
Y esta sería la única ruta posible para que las grandes ligas deportivas vuelvan a la acción en medio de una pandemia que afecta a más de 2 millones de personas en todo el globo terráqueo, advierte el Dr. Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID, por sus siglas en inglés).
Además, recordó que la amenaza actual de coronavirus significa que el verano es demasiado pronto para permitir aficionados en arenas y estadios.
Medidas globales
Dado que «nadie viene al estadio», explicó, habría que tomar las medidas de seguridad sanitaria para los jugadores, esto implica ponerlos «en los grandes hoteles, donde quiera que jueguen, mantenerlos muy bien vigilados, hacer que los examinen todas las semanas y asegurarse de que no terminen de contagiarse entre ellos o sus familias, y simplemente dejarlos jugar la temporada».
En esa misma línea, Mark Cuban, máximo accionista de los Dallas Mavericks y uno de los personajes que más involucrado está en la lucha contra la pandemia del coronavirus que mantiene parada la NBA, espera dar carpetazo a la crisis del coronavirus cuanto antes y señala al mes de junio como posible fecha de regreso.
«Si todo nos sale bien no sería descabellado – y esto lo digo con esperanza, no con conocimiento científico – que podamos jugar a principios de junio», afirmó Cuban durante una entrevista radiofónica en Dallas.
La NBA fue la primera liga importante en suspender las operaciones cuando el brote de coronavirus golpeó a los Estados Unidos, deteniendo los procedimientos el 11 de marzo después de que el centro de Utah Jazz, Rudy Gobert, se convirtiera en el primer jugador en dar positivo al virus .
La NHL y la MLS rápidamente siguieron su ejemplo, mientras que la NCAA se movió para cancelar March Madness. Mientras tanto, la MLB pospuso su temporada regular, que debía comenzar el 26 de marzo, indefinidamente.
La NFL se vio obligada a celebrar el draft de forma remota a finales de este mes en lugar de tener su gran espectáculo planeado en Las Vegas, pero planea comenzar la temporada como estaba previsto el 10 de septiembre.
Mantener la distancia
En el caso de la MLB, autoridades aclaran que cualquier plan solo se aprobaría si la liga se compromete a cumplir estrictamente con las pautas de distanciamiento.
Hasta ahora, la propuesta que está considerando la MLB involucraría a las 30 franquicias que juegan en Chase Field, el hogar de los Diamondbacks de Arizona, en Phoenix y en otros estadios de béisbol en el área de Phoenix, incluidas 10 instalaciones de entrenamiento de primavera.
Tomando en cuenta esto y el optimismo, el director del NIAID sugirió que ambas las para la NHL y la MLB son posibilidades realistas, siempre que los juegos se jueguen a puerta cerrada.
Incluso, es de los que piensa que los fanáticos estarían lo suficientemente felices como para ver juegos en la televisión después de un período tan largo sin deporte.
Por su parte, el presidente Donald Trump, conservando sus intereses, considera que los deportes jugarán un papel crucial para que la vida vuelva a la normalidad en los Estados Unidos, una nación que resulta, hasta ahora, la más afectada por el coronavirus.
«Queremos recuperar nuestros deportes», dijo el magnate estadounidense mientras se dirigía a los medios en el Rose Garden de la Casa Blanca.
“Tenemos que recuperar nuestros deportes. Estoy cansado de ver partidos de béisbol que tienen 14 años», manifestó.
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