Ya habían anunciado que no estaba conformes con el sistema del nuevo torneo, acordado por el consejo de presidentes mientras se jugaba la Copa América y que sólo contempla un ascenso y cero descensos entre primera B y la A.
Por ello, considerando la alta cesantía de jugadores chilenos y las precarias ofertas de un campeonato que no tiene valor deportivo, el SIFUP presentó una carta a la ANFP donde advierte que de no considerarse la medida, los jugadores profesionales no iniciarán el torneo de Copa Chile ni el de apertura a fines de julio.
Carlos Soto, el presidente del gremio aseguró que «no puede ser que haya más de 600 jugadores en condiciones precarias, con un futuro incierto y sin saber si esto va a mejorar. Lo que logró la selección chilena debe verse reflejado en el torneo nacional».
La mayoría de los agremiados de distintos clubes están de acuerdo con la medida de paralizar si no se soluciona el problema.