Según rezas las crónicas de prensa catalanas, al filo del descanso, simpatizantes violentos de Chile no tuvieron otro divertimento que increpar y agredir a la familia de Messi.
Los padres del crack, Celia y Jorge presenciaban la final de la Copa América junto a sus otros dos hijos, Rodrigo y Matías. Los Messi fueron reconocidos por este grupo de violentos, que empezaron a proferirles todo tipo de insultos.
La bronca fue a más y empezaron a lanzarles objetos, uno de ellos impactó en la cabeza de Rodrigo Messi. La intervención del personal de seguridad y de la organización impidió que la agresión fuera a mayores y la familia de Messi fue reubicada en un palco del estadio.