Estados Unidos amaga con no acudir a los JJOO por su conflicto con Corea del Norte

En menos de 24 horas, el Gobierno que preside Donald Trump envió mensajes contradictorios sobre la participación de Estados Unidos en los próximos Juegos Olímpicos de Invierno que se celebrarán en la ciudad surcoreana de Pyeongchang el próximo mes de febrero. Finalmente confirmó que sus deportistas estarán presentes.

El miércoles por la noche, en un programa de la cadena de televisión ‘FOX’, la embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Nikki Haley, dijo que la participación estadounidense en los Juegos estaba en el aire debido a la creciente tensión entre su país y Corea del Norte. Al día siguiente por la mañana, la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Huckabee, añadió más incertidumbre al decirle a los periodistas que cubren la información del presidente que Estados Unidos aún no había decidido si iba a participar.

Finalmente, el jueves por la tarde hora de Washington, Huckabee tuiteó un mensaje tranquilizador. «Estados Unidos espera participar en los Juegos Olímpicos de Invierno en Corea del Sur. La protección de los estadounidenses es nuestra principal prioridad y estamos comprometidos con los surcoreanos y otros países para asegurar las instalaciones».

La tensión entre Estados Unidos y Corea del Norte ha ido en aumento en los últimos meses. El último episodio se produjo hace solo unos días, cuando el régimen de Kim Jong-un lanzó un misil con capacidad para alcanzar cualquier punto de Estados Unidos. La respuesta norteamericana fueron unas maniobras conjuntas con Corea del Sur en las que se movilizaron 12.000 efectivos y 230 aeronaves.

Los próximos Juegos Olímpicos de Invierno ya contarán con la ausencia de Rusia, suspendida el pasado martes por el Comité Olímpico Internacional (COI) por su programa de dopaje de Estado, que incluía una trama para sustituir muestras en el laboratorio que realizó los análisis en los Juegos Olímpicos de Sochi. En Pyeongchang habrá deportistas rusos, pero solo los que demuestren su limpieza. Competirán bajo bandera neutral.

Una de las deportistas estadounidenses que estará en el evento surcoreano, Lindsey Vonn, se ha mostrado muy crítica con Donald Trump. La esquiadora, una de las mejores de todos los tiempos en la modalidad de esquí alpino, ha declarado que quiere representar «a la gente de Estados Unidos, no al presidente».

«Me tomo los Juegos Olímpicos muy en serio, lo que significan y lo que representan, lo que significa andar bajo nuestra bandera en la ceremonia de apertura. Quiero representar a mi país bien. No creo que actualmente haya mucha gente en nuestro gobierno que haga eso», declaró a ‘CNN’ Vonn, que ganó un oro en descenso y un bronce en supergigante en los Juegos Olímpicos de Vancouver en 2010.