Garbiñe Muguruza calentó los motores para imponer su juego

Garbiñe Muguruza (3) comenzó como de costumbre en Roland Garros, algo fría en sus primeros golpes, pero luego fue acelerando el ritmo hasta que se impuso 7-6 (0) y 6-2 a la rusa Svetlana Kuznetsova (42) en un encuentro que estuvo cerca de media hora suspendido por la lluvia.

La hispano-venezolana rompió el servicio a Kuznetsova, pero luego decayó en su impulso inicial cometiendo errores que le permitieron a su rival ganar el sexto juego para llevar a Muguruza hasta el límite.

Pasada de energía en alguna devoluciones, Muguruza fue cediendo terreno ante una Kuznetsova que usó su experiencia para colocarse mejor en pista.

Con el partido igualado a 5 sets por lado, se presentó la lluvia que obligó a detener las acciones durante 30 minutos. 

Tras regresar a la cancha, Muguruza volvió a su estado inicial, atacando con agresividad y devolviendo con potencia para mostrar su categoría.

La española, nacida hace 24 años en Caracas, Venezuela, rompió el servicio a la rusa en el cuarto juego y tomó el control definitivo del partido.

En su próximo juego Muguruza se enfrentará a la joven francesa, Fiona Ferro, una tenista de 21 años con poca experiencia que se coló al cuadro final desde la fase previa.

El primer triunfo le permite a Muguruza seguir luchando por volver al número uno del raking de la Asociación Mundial de Tenis Femenina.

Para ello tiene que coronarse por segunda ocasión en la arcilla de París, siempre y cuando no dispute la final ante la danesa Caroline Wizniascki, actual múmero dos de la clasificación.

Por su parte, el uruguayo Pablo Cuevas, 75º del mundo, tuvo un alentador comienzo al vencer este martes al esloveno Aljaz Bedene (66) en primera ronda por 6-4, 6-3 y 6-2.

En segunda ronda el tenista uruguayo se enfrentará al sudafricano Kevin Anderson, séptimo del raking mundial, que viene de eliminar al italiano Paolo Lorenzi.