Tenista argentino entró «por la ventana» a Roland Garros, condujo por 1000 kilómetros para llegar a su partido y… ganó

La historia es extraordinaria y da la vuelta al mundo. El jueves, el argentino Marco Trungelliti perdió frente a Hubert Hurkacz en la última ronda de la qualy en Roland Garros y se quedó fuera de disputar el cuadro final del torneo.

Por lo mismo, partió a Barcelona, donde reside. El domingo descansaba en su casa y planificaba partir a Vicenza a competir en un Challenger. Pero allí, el argentino se enteró de la baja de Nick Kyrgios y que la lista corría. Es decir, tenía la gran oportunidad de jugar el segundo Grand Slam de la temporada.

Y no lo pensó dos veces. El tenista se subió a su auto junto a su mujer (Nadir), su madre (Susi), su abuela (Lela) y su hermano pequeño (Andre) y recorrió en menos de 10 horas los 1035 kilómetros que hay entre las dos ciudades, llegando una hora antes para enfrentarse el lunes a Bernard Tomic.

Lo insólito es que después de no haber dormido y tras pasarse la noche conduciendo, Trungelliti yganó en cuatro sets (6-4, 5-7, 6-4 y 6-4) y ya se encuentra clasificado para la segunda ronda de Roland Garros.

Con ello aseguró tres cosas. Jugar el torneo más importante de su carrera, asegurarse un premio jugoso por avanzar de etapa y principalmente, convertirse en un nombre que está sonando en todos lados. Una hazaña que sin duda, jamás podrá olvidar.