La elección de Tokio como sede los Juegos Olímpicos 2020 se pone en tela de juicio, luego de que las autoridades francesas imputaran a Tsunekazu Takeda, hombre clave de la candidatura japonesa, por sospechas de corrupción.
Salió a la luz pública un pago sospechoso de dos millones de dólares por la candidatura nipona, durante el proceso de selección de la sede olímpica, pero el presidente del Comité Olímpico Japonés niega haber sido imputado en Francia.
Según las autoridades galas, Takeda debería aclarar un supuesto pago durante la campaña de la candidatura japonesa, en la que Tokio terminó derrotando, en 2013, a Madrid (España) y Estambul (Turquía).
Las acusaciones contra Takeda comenzaron en diciembre pasado, pero hasta este viernes se supo que el diario Le Monde confirmó la información con una fuente judicial, justo cuando el ministro japonés de los Juegos Olímpicos, Yoshitaka Sakurada, visita el país europeo.
Takeda ya había sido interrogado a principios de 2017 por magistrados en Tokio, a solicitud de la justicia francesa.
De acuerdo con el diario francés, los recursos señalados fueron destinados a la sociedad Black Tidings, vinculada al senegalés Papa Massata Diack, también implicado en varios casos de corrupción en el deporte mundial.
Conocida la noticia, la Comisión de Ética del Comité Olímpico Internacional (COI) abrió un procedimiento de investigación y dijo, a través de un comunicado, que “dará seguimiento a la situación».
El COI recordó que actuará como «parte civil» en esta investigación y advierte además que tiene «relaciones estrechas» con las autoridades judiciales francesas, lo que pone en preaviso al japonés.
Entre tanto, en un comunicado enviado a laagencia AFP, Takeda rechazó cualquier «malversación» y aseguró querer «cooperar» con los investigadores para terminar con las dudas, reseñó diario español El Mundo.
Las autoridades niponas, por su parte, dicen que los pagos sospechosos se realizaron en julio y octubre de 2013, en Singapur, bajo la etiqueta de «Tokyo 2020 Olympic Game Bid», procedentes de una cuenta bancaria japonesa.
Sin embargo y pese a estas pruebas, no se prosiguió con una investigación más profunda sobre el caso, dejando en evidencia su desconocimiento de la figura de Papa Massata Diack.
La versión de Le Monde asevera que Takeda justificó en febrero de 2017 que estas cantidades pagaban informes de consejo en lobbying, un argumento puesto en entredicho por los investigadores.
Takeda niega haber cometido irregularidades para favorecer la candidatura de los Juegos Olímpicos de Tokio y asegura que no ha sido imputado en Francia por «corrupción activa».
De hecho, el dirigente japonés desmintió las noticias publicadas al respecto, al afirmar que «no ha recibido ninguna notificación» de la justicia francesa. No obstante, sí admitió que en diciembre pasado «tuvo una sesión interrogatoria en París sobre las actividades para traer los Juegos Olímpicos 2020», tras ser convocado por el juez encargado del caso.
«El Comité de candidatura (de Tokio 2020) pagó una remuneración justa según un contrato de consultoría con la empresa Black Tidings, yo expliqué que en ello no hay ningún acto injusto que suponga soborno», afirmó, citado por la cadena estatal NHK.
Takeda afirmó además que «no conoce» a Diack y que «no tuvo contacto directo» con los representantes de la empresa, y subrayó que durante los interrogatorios «no apareció ninguna novedad sobre el caso», aunque evitó dar más detalles al estar la investigación en curso.
En su comunicado, también señaló que el caso «está causando preocupación en el pueblo japonés, que ha mostrado su apoyo para la realización de los Juegos en Tokio».
https://www.elciudadano.cl/deportes/imputan-por-corrupcion-al-presidente-del-comite-olimpico-de-japon/01/11/
https://www.elciudadano.cl/deportes/desde-francia-denuncian-sobornos-en-la-designacion-de-rio-2016/03/03/
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