Hasta cuatro policías armados y con chalecos antibalas obligaron presuntamente a una mujer a sacarse el vestido que le tapaba el cuerpo en una playa de Niza. Precisamente Niza, donde el pasado mes de julio el Daesh perpetró un atentado que dejó más de 80 muertos, es una de las localidades francesas que prohibió el uso del traje de baño. Una polémica que desató un encendido debate en el país acerca de los límites de la libertad personal y a laicidad.
En una serie de imágenes, se aprecia una mujer estirada en la arena, con pantalones negros apretados, una túnica azul de manga larga y un velo del mismo color. En un momento, se muestra como se le acercan cuatro agentes armados, la rodean y posteriormente ella se saca el vestido, que ni siquiera es un burkini.
El alcalde de la ciudad, Christian Estrosi, no entregó mayores detalles de los hechos, sin embargo confirmó que sólo en esta semana unas 15 mujeres han sido multadas por este motivo.
La prohibición, que además fue respaldada por el primer ministro galo Manuel Valls, se justifica en que representaría, a juicio de quienes apoyan la idea, una «manifestación ostentosa de adhesión a una religión» en momentos que han ocurrido atentados terroristas.
La fotografía fue objeto de múltiples críticas en redes sociales, donde se calificó la acción como una «humillación». En la misma línea se expresó este jueves el alcalde de Londres, Sadiq Khan, quien criticó la prohibición: “Nadie debe dictarle a las mujeres lo que deben llevar. Punto. Así de simple”, declaró en una entrevista publicada en un medio londinense. Y añadió: “No es justo. No digo que nuestro modelo sea perfecto, pero una de las cualidades de Londres es que no sólo toleramos la diferencia sino que además la integramos”.
En las últimas semanas, Niza y 14 municipios franceses más aprobaron por decreto el veto del burkini para evitar altercados públicos en nombre de la seguridad público.
El Consejo de Estado, máximo tribunal administrativo de Francia, debe pronunciarse a partir de este jueves sobre la legalidad de los decretos anti burkini.
Medidas en las escuelas
Además de la prohibición del burkini en algunas partes del país, el gobierno francés de Françoise Hollande incrementó las medidas de seguridad también en otros ámbitos, como el escolar.
Según explicaron este miércoles la ministra de Educación, Najat Vallaud-Belkacem, y el ministro del Interior, Bernard Cazeneuve, las escuelas implementarán una serie acciones, concretamente tres al año, para enseñar a los alumnos a lidiar con las amenazas de terrorismo.
Según explicaron, se enseñará a los niños a esconderse o escapar, dependiendo de la situación y el lugar en que están.
Todos los estudiantes de 13 y 14 años y los representantes de aulas recibirán entrenamiento básico para salvar la vida. Vallaud-Belkacem dijo que, en estos momentos, solamente 30% de los estudiantes están entrenados.
En prescolar y kindergarten, para niños de entre 2 y 6 años, no se debe hacer mención de un ataque ni peligro, pero se debe enseñar a los niños a esconderse y mantener silencio a través de juegos, dijo Vallaud-Belkacem, quien agregó que «no es cuestión de sucumbir al pánico ni la paranoia, sino simplemente enfrentar nuestras responsabilidades», y recordó el ataque del extremista musulmán Mohamed Merah contra una escuela judía en el 2012 en la ciudad de Toulouse.
Otras medidas de seguridad están ya implementadas desde los ataques terroristas del año pasado en París. Hay patrullas policiales en áreas escolares y se ha pedido a padres y estudiantes evitar congregarse junto a escuelas y reportar cualquier conducta sospechosa.
Los directores de escuelas van a reunirse con los padres en septiembre para explicar detalladamente las medidas de seguridad.