Un hombre surcoreano de 81 años se ha prendido fuego este miércoles durante una manifestación convocada ante la Embajada de Japón para protestar por los abusos cometidos por la ocupación nipona durante la Segunda Guerra Mundial, un asunto que aún sigue siendo polémico 70 años después.
Cada semana, numerosas personas acuden junto la Embajada para recordar a las denominadas mujeres de confort, un eufemismo con el que se conoce a las mujeres convertidas en esclavas sexuales por el Ejército de Japón.
Los abusos cometidos por Japón durante la guerra aún siguen escociendo en la región, que exige de forma reiterada disculpas públicas y directas por parte de Tokio. El sábado,Día de la Independencia, Corea del Sur conmemora el septuagésimo aniversario del fin de la era colonial (1910-1945).