El sociólogo Alberto Mayol planteó que los cuestionamientos al sistema previsional de las AFP se instalan como un conflicto entre élite y ciudadanía. En su comentario en radio Sonar, dijo que “este es el primer tema, en todos estos años, que toma exactamente la forma del conflicto de base, donde se depositó la línea divisoria entre unos y otros”.
El académico explicó que el conflicto de base «tiene que ver con la distinción entre élite y ciudadanía. Si tú estás en la élite, la gente te va a denunciar por ser miembro y las élites sienten que están siendo acosada por un malestar social».
«En general, todas las agendas políticas que han existido en el último tiempo, de alguna manera, desconocían esta lógica. Casi todas las fórmulas de articulación política estaban pensadas en un conflicto que tenía que ver con otras distinciones. En este caso, la forma que está adoptando el conflicto es exactamente igual a la realidad del conflicto. El sistema político entiende que tienen que blindar esto, están nuevamente configurando una alianza con el sector económico y El Mercurio cierra filas con el gobierno», agregó.
Para Mayol, las condiciones en que se ha dado la impugnación al sistema de AFP dejan al descubierto la dicotomía entre sus defensores y detractores. «Si el conflicto queda desnudo, no hay manera de salir de la crisis. Esto está yendo por un camino en el cual no hay una crítica interna importante, no hay eje izquierda-derecha, entonces la ciudadanía dice ‘están ellos que defienden las AFP y estamos nosotros, que queremos que caigan'», señaló.
Actores y fusibles
Parte de su análisis se centró en los actores relevantes que participan de la discusión. En este sentido, expuso que la posibilidad de defensa hacia las AFP quedó mermada, desde que José Piñera, su creador, salió a defender el modelo. Para Mayol, “eso fue un error de base, porque el primer principio de todo poder es que hay fusibles que se queman antes que el poder».
Sobre el movimiento que se opone a las administradoras, el sociólogo planteó que “la crisis de las AFP se ha dado sin líder. La participación de Luis Mesina es mucho más pequeña que la de José Piñera en el tema. Por el lado de No+AFP no hay un nombre. Estamos en un escenario tipo Fuenteovejuna, que es todo el pueblo y nadie es el líder de esto. Entonces, no hay forma de cooptación, compra, canje o negociación».
De todas formas, puso el acento en que el movimiento ya logró deslegitimar a las AFP, por lo que “tienen que mostrar viabilidad en algún punto”.
¿Qué tiene que decir el gobierno?
«Yo creo que el gobierno está de verdad en una situación que parece una oportunidad, pero que no lo es tanto, que es muy difícil de administrar y tengo la impresión de que no están las condiciones para tener una articulación política suficiente para salir de la crisis», expuso Alberto Mayol.
Sin embargo, explicó que el gobierno tiene una oportunidad, siempre y cuando logre “estructurar una dimensión de conflicto que no sea entre élite y ciudadanía. Este esfuerzo de invitar a Lagos y a Frei tiene mucho que ver con eso, con tratar de dibujar esto como un conflicto entre izquierda y derecha».
A pesar del margen que existe para el gobierno, Mayol cree que no es fácil abordar esta coyuntura, «porque la densidad política del gobierno es muy débil. Tenemos un gobierno cuyo principal vocero es el ministro de Hacienda, que por definición es la peor persona para ser el vocero, porque nuevamente queda desnuda la política. Todo se termina en plata en cinco minutos, cosa que es angustiante, porque significa que no hay política».