La compañía Arbistar 2.0 bloquea inversiones por valor de 93,4 millones de euros. Hay 120.000 afectados, que estiman ser víctimas de un esquema fraudulento. El director de la empresa promete devolver el dinero y argumenta que todo se debe a un fallo informático, aunque el ‘modus operandi’ recuerda al esquema Ponzi.
El 12 de septiembre la compañía emitió un comunicado en el que avisaba a sus clientes de la congelación de sus cuentas por culpa de un «fallo informático». En la práctica, desde entonces nadie puede recuperar el dinero invertido ni las ganancias.
Arbistar 2.0, con sede fiscal en Tenerife y dirigida por Santiago Fuentes, es una empresa financiera de inversión en criptomonedas con miles de clientes en su plataforma. Les ha prometido devolverles el dinero de manera escalonada, pero estos ven muy difícil su recuperación. El caso se halla en manos de la Policía de Tenerife, que ha iniciado una investigación. Según declaró el propio Fuentes a Televisión Canaria, el volumen de las inversiones afectadas asciende a «unos 10.000 bitcoins». Al cambio actual de esta moneda virtual, la cifra equivale a 94,4 millones de euros. Pero Tulip Research, una compañía especializada en operaciones financieras fraudulentas, estima que la cantidad es considerablemente mayor: unos 850 millones de euros.
«Esto no es una estafa piramidal, ni un Ponzi, ni ninguna historia», afirmó el director de Arbistar 2.0 por videoconferencia al citado canal. En su opinión, el bloqueo obedece solamente a «un error informático» que la compañía está intentando subsanar para que los afectados recuperen sus inversiones «en seis o doce meses». Pero el fallo podría ser mucho más grave.
Recordamos que el esquema Ponzi es una operación fraudulenta de inversión donde las ganancias que obtienen los primeros inversores se obtienen del propio dinero aportado o del de nuevos inversores. El esquema funciona mientras crezca la cantidad de nuevos inversores-víctimas.
Un viejo conocido
No es la primera vez que Santiago Fuentes se enfrenta a una investigación. En 2017 la Audiencia Nacional condenó al responsable de Finanzas Forex, Germán Cardona Soler (conocido como el Madoff español) a 13 años y tres meses de prisión por una estafa piramidal.
Aquel fraude afectó entre 2007 y 2010 a 180.000 personas y a inversiones por valor de 350 millones de euros. Fuentes era el director de expansión de Finanzas Forex, pero quedó absuelto (su labor consistía en la captación de clientes). El caso del bloqueo de la plataforma de Arbistar 2.0 se halla ya en manos del Conchi Vieira Abogados, que en representación de un centenar de afectados está actualmente preparando una demanda por la vía penal.
Arbistar 2.0 está dedicada al arbitraje de criptodivisas; adquiere en el mercado monedas como los bitcoins y las revende en otra plataforma a un precio mayor. Arbistar prometía una rentabilidad diaria del 1%. A tal fin vendía a sus clientes suscripciones anuales del programa informático con el que se ejecutaba esa tarea de arbitraje. Pero los afectados consideran que Arbistar ha aplicado un esquema piramidal en el que los rendimientos de los clientes de mayor antigüedad no provenían de las inversiones de negocio, sino de los aportes de los nuevos usuarios.
¿Fallo informático?
Los rumores de las últimas semanas provenían de las críticas hacia el Community Bot de la compañía, el producto financiero que ejercía de bot de arbitraje y que se había vuelto insostenible.
En su comunicado,
Arbistar defiende que una configuración errónea del bot en 2019 (se recalculó su tope en 50.000 euros) hizo que los clientes percibieran beneficios más altos, hasta quedarse la compañía sin liquidez, pues sus administradores, ante la falta de ventas del producto, supuestamente se limitaron a devolver las «ganancias» de los usuarios más antiguos con las tasas cobradas a los nuevos, formándose así una bola de nieve incontrolable. En cualquier caso, ha pasado un año desde que el bot principal de Arbistar 2.0 empezara a fallar y a arrojar pérdidas a diario. Sólo el 12 de septiembre la compañía emitió el comunicado anunciando el cierre del bot.
Desde Arbistar se comprometen a devolver el dinero en los próximos meses. Y en el caso de que algún cliente decida acudir a la vía judicial, no acometería la devolución hasta haber una resolución por parte de un juez. En definitiva, una propuesta a cambio de renunciar a emprender acciones legales en su contra. «Como mínimo, todo el mundo va a recuperar lo que aportó», promete el fundador de la compañía», que no revela su paradero por motivos de seguridad, aunque asegura permanecer en Tenerife.
Cortesía de Sputnik
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