Según un informe realizado por la consultora McKinsey & Company, que examinó la evolución de la deuda pública, privada y familiar en 47 países, muestra que en los últimos siete años la deuda mundial ha crecido en más de 57 billones de dólares.
Este creciente endeudamiento se ha convertido en un elemento estructural de la economía mundial, pero la situación de la deuda no afecta por igual a todos los países, señalaron los responsables del informe.
El país más endeudado es Japón, con una deuda que equivale al 400% de su PIB, seguido por Irlanda, Singapur, Portugal y cierra el ‘top’ cinco Bélgica, que cuenta con una deuda tres veces mayor que su PIB. Luego aparece Países Bajos (325%) y Grecia (317%) se encuentra en el séptimo lugar por delante de España (313%).
La deuda de Francia (280%), Reino Unido (252%) y EE.UU. (233%) no se puede decir que sea pequeña en relación a su PIB, según el informe, mientras que la de Rusia es de apenas el 65%.