El Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó este lunes 2 de agosto la nueva asignación de los Derechos Especiales de Giro (DEG), por un total de 650.000 millones de dólares, a los países miembros.
El dinero se redistribuirá entre las naciones que más lo necesiten para paliar los efectos de la pandemia, según su cuota de participación en el organismo. La asignación general de DEG entrará en vigor el 23 de agosto de 2021.
En el caso de Argentina, que tiene una participación del 0,67 %, recibiría 4.400 millones de dólares, que utilizará para abonar intereses de deuda con ese mismo organismo, según reconoció semanas atrás la vicepresidenta Cristina Kirchner.
«Esta es una decisión histórica: la mayor asignación de DEG en la historia del FMI y una inyección de ánimo para la economía mundial en un momento de crisis sin precedentes», dijo la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, según reza un comunicado de la entidad multilateral de crédito.
«La asignación de DEG beneficiará a todos los miembros, abordará la necesidad mundial de reservas a largo plazo, generará confianza y fomentará la resiliencia y la estabilidad de la economía mundial. Ayudará particularmente a nuestros países más vulnerables que luchan por hacer frente al impacto de la crisis de COVID-19″, consideró Georgieva.
Asimismo, la titular del Fondo anunció que continuarán «trabajando activamente con los países a fin de identificar opciones viables que permitan canalizar voluntariamente DEG de los países miembros más ricos a los más pobres y vulnerables, para apoyar su recuperación de la pandemia y para que logren un crecimiento resiliente y sostenible«.
Por otra parte, el organismo estudia la posibilidad de que los países miembros que tienen posiciones externas sólidas distribuyan voluntariamente una parte de sus DEG para ampliar los préstamos a los países de bajo ingreso que pueden acceder a través del Fondo Fiduciario para el Crecimiento y la Lucha contra la Pobreza (FFCLP) del FMI, un mecanismo que en la actualidad no exige intereses.
El DEG es un activo de reserva internacional creado en 1969 por el FMI para complementar las reservas oficiales de los países miembros. Se basa en una cesta de cinco monedas principales: el dólar de EE. UU., el euro, el renminbi chino (RMB), el yen japonés y la libra esterlina.
Fuente: RT.