Los mercados bursátiles del mundo han tenido en este mes el peor inicio de año desde la gran depresión de finales de los años 20 del siglo pasado. En sólo tres semanas las pérdidas en las diferentes plazas rozan 8 billones (millones de millones) de dólares, destrucción de riqueza que, comparativamente, equivale a la mitad del valor de la economía de Estados Unidos, la mayor del planeta.
La tendencia de los mercados financieros en días recientes, marcada por un desplome de los precios del petróleo y otras materias primas; la devaluación de las monedas de países emergentes frente al dólar y la desaceleración de la economía china, cuyo crecimiento de 6.9 por ciento en 2015 fue el más bajo en 25 años, avivó temores de que la economía global se encamine a una recesión, cuando todavía no ha superado en su totalidad los efectos de la iniciada en 2009, expusieron analistas.
En medio del creciente clima pesimista que inunda los mercados financieros, se perdieron cerca de 7.8 billones de dólares del valor de las acciones en las tres semanas anteriores al 21 de enero, señaló Bank of América Merrill Lynch (BAML).
No descartamos una recesión el próximo año. Habrá problemas y nos preocupa la falta de municiones políticas para lidiar con un impacto de envergadura, dijeron Ethan Harris y Emanuella Enenajor en una nota del banco de inversión, uno de los más importantes de Wall Street.
Carnicería financiera
En los primeros 14 días hábiles del año las pérdidas en los mercados bursátiles ascendieron a casi la mitad de la economía de Estados Unidos –cuyo producto interno bruto (PIB) es de 16 billones de dólares, de acuerdo con datos del Banco Mundial–, en lo que es calificado como el peor inicio del año en los mercados desde la gran depresión de 1929, de acuerdo con estadísticas del comportamiento de los mercados.
David Buik, analista del banco de inversión Panmure Gordon, apuntó que la carnicería financiera en los mercados de valores en las primeras semanas del año marcó el peor inicio desde 1928.
Las pérdidas acumuladas en las acciones que cotizan en los mercados provocaron que los inversionistas y gestores de fondos colocaran la semana pasada la mayor cantidad de dinero en fondos de bonos de gobierno, considerados instrumentos más seguros, debido a que pagan una renta fija, a diferencia de las acciones, cuyo valor se mueve día a día, en un indicio de que temen que la economía mundial caiga en recesión, dijo BAML.
Economistas del banco estadunidense también señalaron que la probabilidad de que la economía de Estados Unidos, la mayor del mundo y de la que depende la economía mexicana, entre en recesión el próximo año subió de 15 a 20 por ciento, aunque indicaron que la posibilidad de que se produzca una gran crisis como la de 2008-2009 es lejana.
Pese al incremento, la probabilidad de una en cinco de una recesión normal sigue siendo baja, dijeron economistas del banco estadunidense, que recortaron su proyección de crecimiento en 2016 a 2.1 por ciento de 2.5. Una recesión suele definirse como dos trimestres consecutivos de contracción.
No obstante, cuando los mercados están en este estado de fragilidad, hay cierta tentación de perder de vista los fundamentos económicos. Para nosotros, la economía está bien y los riesgos de recesión son bajos, aclararon los analistas.
Previamente esta semana, economistas de Citi dijeron que está aumentando el riesgo de una recesión global, mientras Morgan Stanley refirió que la probabilidad es de 20 por ciento en el peor de los casos, y el banco francés Societe Generale la ubicó en 10 por ciento, con un incremento de posibilidades.
Las acciones globales tuvieron uno de los peores inicios de año de la historia, en el marco de un derrumbe de los precios del crudo, una profunda preocupación por la economía china y los coletazos del primer aumento de las tasas de interés de la Reserva Federal en casi una década.
Desde comienzos del año las acciones en la bolsa de Nueva York han perdido cerca de 8 por ciento, dentro de los cuales el índice ampliado Standard and Poor’s 500 es el más afectado, al acumular una baja de 9 por ciento hasta el pasado miércoles, previo al repunte de las dos últimas sesiones de la semana.
La Bolsa Mexicana de Valores registra una pérdida de 3.16 por ciento, mientras el índice Bovespa de la bolsa de Sao Paulo, la mayor de América Latina, agrupa una baja de más de 8 por ciento y se encuentra en su nivel más bajo desde marzo de 2009.
En Londres el índice Ftse 100 perdió 9.11 por ciento hasta el pasado miércoles, cuando se desplomaron los mercados globales, con lo que las bolsas europeas se ubicaron en niveles mínimos en 15 meses.
Hasta el pasado jueves, cuando el índice de Shanghai cerró con baja de 3.2 por ciento, acumuló una caída de más de 18 por ciento en lo que va de 2016.