El recientemente publicado estudio World Happiness Report 2015 (Informe Mundial de la Felicidad 2015), que utiliza datos de un sondeo realizado por Gallup sobre los ciudadanos de más de 150 naciones, ha elaborado una lista con los países más y menos felices. Pero, ¿existe algún tipo de relación entre el estado de satisfacción y la alegría de una nación y sus riquezas?
El mapa resultante da lugar a un elemento llamativo: por lo general, la población de los países más ricos está considerablemente más satisfecha con su vida que aquellas personas de países más pobres. De ese modo, esta evidencia sugiere que tanto la felicidad momentánea, como el nivel de satisfacción vital, están significativamente correlacionados con el PIB de un país, publica el portal Vox.
A nivel mundial, los países situados a la cabeza son Suiza, Islandia, Dinamarca, Noruega y Canadá. En el caso de la región de América Latina y el Caribe, a la cabeza de la clasificación se sitúa Costa Rica, seguida de México, Brasil, Venezuela y Panamá.
Así, este informe anual establece que el PIB se sitúa como una de las variables más importantes a la hora de determinar la felicidad nacional de un país, junto con otras cinco características: apoyo social (si las personas tienen a alguien en su vida con quien pueden contar), poseer una esperanza de vida saludable, la libertad (se trata de la respuesta a la pregunta: ¿Está satisfecho con su capacidad para escoger qué hacer con su vida?), la generosidad y la corrupción gubernamental.