La media es de 168 puntos. Antes de 2007, cuando inició la crisis alimentaria, nunca excedía los 120. Los precios mundiales de alimentos volvieron a subir, informó este miércoles el Índice de Precios de la FAO -una cesta compuesta por cereales, semillas oleaginosas, productos lácteos, cárnicos y azúcar- que registra cuatro meses seguidos de incrementos.
Sin embargo, las condiciones del mercado son diferentes que las que provocaron la crisis de precios alimentarios de hace dos años, señaló la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
En su informe de diciembre «Perspectivas alimentarias», difundido este miércoles, la FAO dijo que el índice de precios mantuvo una media de 168 puntos en noviembre, la más alta desde septiembre de 2008, que a su vez fue 21 por ciento más baja respecto al pico de junio de 2008.
Antes de su nivel récord de 2007/2008, el índice nunca excedía 120 puntos, y durante la mayor parte del tiempo se encontraba por debajo de 100 puntos.
«En el inicio de la alza de precios de 2007, la FAO identificó una serie de causas posibles que contribuyeron al alza de precios», indicó el reporte.
Entre ellas citó el bajo nivel de las reservas mundiales de cereales, las malas cosechas en los principales países exportadores, el rápido aumento de la demanda de productos básicos agrícolas que sirven de base a los biocombustibles y el alza de los precios del petróleo.
«Mientras se aceleraba la fortaleza de los precios, emergían otros factores para reforzar la tendencia alcista», añadió. Entre dichos factores están las restricciones a las exportaciones impuestas por los gobiernos y la debilidad del dólar.
Así como un creciente apetito por parte de los especuladores por los fondos indexados, que permiten ampliar su cartera de inversiones en un contexto mundial de exceso de liquidez.
«Lo que hizo excepcional el alza de 2007/2008 fue la concurrencia de gran cantidad de factores que culminaron en la alza de precios sin precedentes y que se fomentara su volatilidad», dijo el reporte de la FAO.
Destacó que hoy en día, las reservas mundiales de cereales se encuentran en niveles más saludables, aunque algunos mercados enfrentan a condiciones más difíciles.
Indicó que los factores macroeconómicos, como las tasas de cambio, la volatilidad de los precios del petróleo y los bajos tipos de interés están llevando a los inversores a situar su dinero en los mercados de productos básicos.
«Aunque los principios básicos del suministro y demanda continuarán configurando en el mercado de los productos básicos, se ha afianzado la susceptibilidad del sistema alimentario mundial a factores económicos externos no relacionados con el sector, y ello obliga a una vigilancia constante», señaló la FAO.
«El estado saludable de las reservas y las buenas perspectivas de producción reducen el riesgo de una fuerte subida de precios durante los próximos seis meses, pero la FAO continuará vigilando muy de cerca la situación», aseguró Hafez Ghanem, frente del departamento de Desarrollo Económico y Social del organismo.
Notimex
Fuente: www.jornada.unam.mx