Un fuerte desplome en las bolsas de valores del mundo han reactivado los temores a una crisis financiera global. Desde el mes pasado e inicios de agosto las señales de desaceleración de la economía china, el puntal de la economía mundial desde la crisis de la década pasada, han venido contagiando a todos los mercados, con violentas caídas en las bolsas. Analistas prevén que estos son los primeros anuncios de un nuevo colapso financiero mundial.
En China, el índice de Shanghai cayó este lunes más de un ocho por ciento, el que arrastró a los mercados europeos y americanos. Otro índice chino, el Hang Seng cayó 5,4 por ciento y el Nikkei, de Tokio, más de un cuatro por ciento. La Bolsa de Santiago, por su parte, perdía más de un dos por ciento durante la mañana y Sao Paulo un cinco por ciento.
El Dow Jones de Wall Street caía más de un tres por ciento, en tanto la Bolsa de París llegó a disminuir un 7,5 por ciento durante esta mañana. Durante la jornada, todos los grandes mercados europeos cerraron con descensos superiores a un cinco por ciento.
Este desplome accionario sucedía de forma simultánea a una nueva pérdida en los precios del petróleo. El Brent, del Mar del Norte, caía este lunes por primera vez desde el 2009 (momentos de la crisis de las subprimes) bajo los 45 dólares por barril. El petróleo de Texas, por su parte, se cotizó esta mañana bajo los 40 dólares el barril.
El cobre, el principal producto de exportación chileno, tuvo este lunes una pésima jornada, con una caída superior al tres por ciento. Es el descenso diario mayor del 2015, se ubica a un nivel del 2009, y, según analistas citados por el portal DF, el metal rojo está ya por debajo del costo promedio de producción.
Como reacción, en Santiago el dólar sufrió un nuevo repunte, para superar la barrera de los 700 pesos.
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