Sólo 23 pisos a medio terminar fueron los construidos en lo que prometía convertirse en la torre más alta de Sudamérica, el proyecto Costanera Center, dejando cesantes a 900 trabajadores, los que se suman a los ya mil 800 despedidos desde noviembre. Horst Paulmann, propietario del grupo Cencosud, priorizó garantizar ganancia de los accionistas antes que empleo de sus trabajadores.
La prometida Torre de Babel del magnate Horst Paulmann, con 70 pisos y 300 metros de altura, quedó ayer reducida a una torre a medio terminar de 23 pisos y menos de 80 metros. La decisión fue tomada por Cencosud ante los efectos de la crisis económica, que han provocado una fuerte baja en el consumo, lo que espantó a los operadores que esperaban instalarse en el rascacielos, dicho en palabras de la prensa chilena como producto de un “menor dinamismo de la economía”.
“Por ahora no tiene sentido seguir avanzando al ritmo actual si no podremos rentabilizar las instalaciones de Costanera Center, por lo que en el actual contexto económico lo razonable y responsable hacia nuestros accionistas es enfocar nuestro plan de inversiones en aquellos proyectos que permitan obtener retornos inmediatos o garantizados”, explicó anoche en un comunicado el gerente general corporativo, Daniel Rodríguez.
Se cumple así el temor de los 900 trabajadores que permanecen en las faenas, que justo ayer se habían dirigido junto a la CUT al ministerio del Trabajo para exigir medidas paliativas ante el desempleo generado por las decisiones de Paulmann. Según Miguel Nazar, presidente del Sindicato Unido de Costanera Center se espera que a los 750 trabajadores despedidos a comienzo de año se sumen cerca de 900 este mes.
Nazar cuestionó además la decisión de pensar en la rentabilidad de los accionistas y no en los trabajadores y sus familias, agregando que a los 900 trabajadores que serán desvinculados “gradualmente” desde hoy se suman mil 800 que vienen siendo despedidos desde noviembre pasado.
La CUT, por su parte, a través de José Santos, Coordinador de los Trabajadores de la Construcción de la multisindical, clarificó que su demanda es muy concreta para revertir el desempleo generado por Paulmann: “estamos pidiendo que se reactiven las obras viales que la Seremi de Transportes le exigió a Cencosud”.
Pero las obras viales, exigidas por la autoridad como condición de la construcción ante el colapso vial que provocará la población flotante diaria de 50 mil personas que se proyecta, fue otro argumento más para suspender las obras. A pesar de que la inversión es marginal al lado de los US$ 600 millones invertidos en total
Los trabajadores de Costanera Center, además de la CUT y otros sindicatos del sector construcción, convocaron a una marcha en Plaza Italia para el próximo martes 3 de febrero, en la que exigirán la implementación inmediata de medidas paliativas y de protección a los trabajadores que han quedado sin empleo.
Francisco Figueroa
El Ciudadano
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