Venezuela, probablemente, no había recibido uno de los apoyos más determinantes del Caribe, desde que el presidente haitiano Alexandre Pétion, en 1816, ayudó a Simón Bolívar, el Libertador de Venezuela, a reorganizar sus fuerzas patriotas en Haití para que volviera a la lucha por la independencia de su patria, tras la pérdida de la Segunda República.
Venezuela recibió recientemente el respaldo de la mayoría de gobiernos de los 15 países que conforman la Comunidad del Caribe, el Caricom, durante la 29º reunión de jefes de Estado de esa comunidad, que concluyó el pasado 28 de febrero justamente en Haití.
“Uno de los mensajes más importantes que recibimos para el pueblo y Gobierno revolucionario, es el de solidaridad y respeto a los asuntos internos de la República Bolivariana de Venezuela», manifestó el viceministro para el Caribe por Venezuela, Raúl Licausi, sobre esta reunión.
Destacó que las naciones de la Caricom «se han mantenido firmes en su posición pese a las constantes presiones por parte de factores internacionales, demostrando que la dignidad de El Caribe es ejemplar”, destacó un despacho de prensa de la Agencia Venezolana de Noticias, AVN.
Esta posición de los países de la Caricom, a excepción de Guyana que tiene problemas limítrofes con Venezuela y es aliada del gobierno de los Estados Unidos, EEUU, y de la petrolera ExxomMobil, se había manifestado a favor de Venezuela durante una gira que hiciera el canciller de ese país, Jorge Arreaza, previo a la cumbre de la Caricom.
Gerardo González, analista internacional venezolano, con maestría en Seguridad y Defensa, y docente del Instituto de Altos Estudio de Caracas, dijo que Venezuela, en la etapa de la revolución bolivariana, “siempre ha tenido un respaldo importante por parte del Caricom”.
No obstante, agregó que “ahora más que nunca es valioso ese respaldo, en medio de los ataques inéditos que en su historia contemporánea vive Venezuela”, por parte de los EEUU como potencia mundial y sus organismos multilaterales financieros, políticos y militares.
Cumbre de Las Américas sin Venezuela
González aseveró que así como Venezuela ha recibido uno de los apoyos más importantes del Caribe en medio de la persecución internacional que padece, igualmente le han dado la espalda unos aliados “naturales” que eran de su suma valía.
Es el caso de sus países vecinos del Sur de América, con los que había establecido alianzas de mucha trascendencia en el gobierno de Hugo Chávez (1998-2013), como el reimpulso del Mercado Común del Sur (Mercosur), pero que con los cambios de gobiernos en los últimos años se produjo un retroceso en las relaciones multilaterales.
Entre estos países vecinos destaca Colombia y Brasil, también Argentina, Perú y Chile, entre sus aliados más connotados en otros tiempos, que igualmente forman parte del Grupo de Apoyo a Contadora, mejor conocido como Grupo de Lima, organismo multilateral creado en 1985, para promover la paz en los conflictos armados vividos en Centro-América, especialmente Nicaragua, Salvador y Guatemala, en la década de los años ochenta.
Este grupo, junto con EEUU, Canadá y otros gobiernos de países del hemisferio, desde ese organismo multilateral, han maniobrado contra Venezuela. El último hecho, el retiro de la invitación al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, a la VIII Cumbre de las Américas, que se realizará en Lima, Perú, el 13 y 14 del próximo mes de abril.
A esta acción inamistosa se opone Ecuador. En todo caso, la mayoría de países de estos gobiernos adversos a la Revolución Bolivariana, se han negado a que el presidente constitucional de Venezuela, Nicolás Maduro, asista a la cumbre.
Estos se oponen a las elecciones previstas en Venezuela para el 20 de mayo del presente año, en las que se escogerá, entre otros cargos, al del presidente de esa República.
Estos gobiernos, el de Mauricio Macri de Argentina, Michel Temer en Brasil, Juan Manuel Santos en Colombia y el recién electo Sebastián Piñera en Chile, son aliados de los grupos económicos y partidos políticos de la derecha de Venezuela, entre los que destacan Acción Democrática (AD), Primero Justicia (PJ) y Voluntad Popular (VP), integrantes de la Meda de la Unidad Democrática, Mud, alianza opositora que “promueve la intervención extranjera” en Venezuela, destacó el internacionalista González.
Estos partidos opositores venezolanos “se retiraron del proceso electoral convocado para el 20 de mayo, luego de que presionaban para que se adelantaran las elecciones presidenciales, tal y como finalmente sucedió, y ellos mismos lo habían acordado con el Gobierno en el proceso de diálogo que llevaban a cabo las dos partes en República Dominicana, días antes de que la oposición se retirara de la mesa de negociación”, recordó el investigador.
Un respaldo firme del ALBA-TCP
Dijo que así como Venezuela cuenta con el respaldo de la Caricom, igualmente tienen un apoyo frontal de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), organismo de integración regional, fundado el 14 de diciembre de 2004 por Hugo Chávez y Fidel Castro, el ex-líder de la Revolución Cubana.
Este grupo de integración regional surgió como respuesta al Área de Libre de Comercio para las Américas (Alca) impulsada por EEUU, que intentaba implantar un libre mercado en detrimento de las economías emergentes del Sur del continente americano.
La alianza, conformada por Cuba, Bolivia, Nicaragua, Ecuador, Antigua y Barbuda, Dominicana, Granada, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, San Vicente y Las Granadinas, Surinam y Venezuela, reunidos el pasado 5 de marzo en Caracas, en su cumbre número XV, manifestaron
su solidaridad con Venezuela ante los ataques internacionales y rechazaron la exclusión de ese país en la octava Cumbre de las Américas en Lima.
«Rechazamos la exclusión de la hermana República Bolivariana de Venezuela y a su presidente, Nicolás Maduro Moros, en la octava Cumbre de las Américas”, destacó la declaración final del encuentro, leída por su secretario general, el boliviano David Choquehuanca.
La declaración advierte que “dicha cumbre debe ser un punto de encuentro para todos los Estados del continente y un espacio donde todos podamos expresar nuestras ideas, alcanzar consensos, de sentir y debatir, respetando nuestra diversidad».
Venezuela es epicentro de debate y controversia en organismos multilaterales internacionales, políticos y económicos, la importancia geo-política y geo-estratégica de ese país, por su ubicación geográfica, el Norte del Sur de América, por contar con la mayor reserva probada de petróleo en el mundo y tener un proyecto político-económico que contraviene a los intereses de las potencias tecnológicas, militares y económicas del mundo, la hacen un blanco persistente de defensa y ataque.
Uno de los ataques más incesantes ha sido de carácter económico y financiero a través de organismos “multilaterales” controlado por los EEUU, con sanciones, bloqueos e implantación de retrasos administrativos e imposibilitar el pago de membresías en la banca internacional, así como no permitir el acceso a créditos.
En el campo político el torpedeo de las relaciones multilaterales de Venezuela con otros países, que se manifiesta en este momento, por lo menos, a la negativa de que su principal represente del Estado, el presidente Nicolás Maduro, asista a la Cumbre de Las Américas, entre otras acciones. En el militar las amenazas constantes del que es objeto por parte del gobierno norteamericano y de su Comando Sur.
El internacionalista y politólogo Gerardo González dijo que en medio de este escenario internacional hostil Venezuela se defiende con sus propios recursos, así como con sus alianzas multilaterales que tiene con América Latina, China, Rusia y otros países asiáticos y europeos. “Venezuela no está sola”, advirtió González.