Ante el informe sobre las conversaciones entre el Mineduc y la conducción del Colegio de profesores

El día miércoles 15 de abril comenzó a circular un informe enviado por el Presidente del Colegio de Profesores, que da cuenta sobre el estado de las conversaciones entre el MINEDUC y el COPROCHI en relación a la política nacional docente. Frente a dicho informe, indicamos lo siguiente:

PRIMERO: Es inaceptable que un documento relativo a tan sensible tema para el magisterio carezca de la más mínima formalidad. Al no contar con firma ni logo, puede ser totalmente desconocido por el MINEDUC, si es que efectivamente éste lo redactó.   Los y las docentes nos merecemos respeto en todas y cada una de las acciones emprendidas. Este informe es una ofensa a nuestra responsabilidad y seriedad con la que hemos tomado la demanda de la carrera docente.

SEGUNDO: Con asombro se lee en su introducción que “El colegio y el MINEDUC han concluido esta fase pre-legislativa con una importante cantidad de acuerdos y también varios disensos que serán expuestos en el Congreso”. Los docentes nos preguntamos ¿Acuerdos?  Y si es que los hubiese ¿Dónde está la firma del Ministro de Educación? ¿Cuándo se realizó la consulta nacional para respaldar estos acuerdos, tal como lo mandató la resolución de la Asamblea Programática de enero del 2014? ¡Los profesores no aceptamos acuerdos de cocina!

TERCERO: Rechazamos la manera mañosa en que –quien haya escrito este texto- se presenta la información. Nada se dice sobre la concepción general de carrera docente, la cual como se sabe, para el MINEDUC es un proceso de certificación de competencias individuales asociadas al salario. Este es el tema de fondo y estructural. Haciendo caso omiso de ello, el ‘informe’ presenta un desglose de puntos  extremadamente genéricos, es decir, pueden ser cualquier cosa, como por ejemplo la idea según la cual se “aumentarán las horas no lectivas”,¿a esta fecha no hay proporciones? Nuestra propuesta es clara: 50/50. Si el MINEDUC no se pronuncia sobre esta demanda no se puede afirmar, como lo hace el texto, que hay “coincidencia”.  Seamos claros, no hay acuerdo en este punto.

CUARTO: Denunciamos la falsedad que se establece en el último párrafo de la página cuatro  en donde se afirma, en relación al desarrollo de la carrera, que en el marco de las “coincidencias” “existirá un proceso de certificación nacional que mostrará el nivel de desarrollo profesional de las y los profesores, el que será obligatorio hasta el tercer tramo de desarrollo profesional”. Si comparamos la propuesta del Colegio de Profesores, en el acápite de desarrollo profesional -páginas 6 a la 8-, ¡en ninguna línea se habla de certificaciones! Esta mirada de carrera es precisamente la que se rechaza. Peor aún, el ‘informe’ de las conversaciones establece también que la certificación operará vía conocimientos disciplinarios y pedagógicos, cuestión explícitamente cuestionada en la página 9 de nuestra propuesta.

Este punto nos parece de una gravedad extrema, porque al definirse como acuerdo, significaría la renuncia total por parte de los dirigentes que se mantuvieron en la mesa con el MINEDUC a nuestras propuestas, junto con borrar con el codo lo que cientos de docentes hemos discutido y aprobado en distintas instancias.

QUINTO: A la luz del modelo propuesto, los docentes estaríamos sometidos, al menos, a tres evaluaciones. La nacional (vigente en la actualidad y que sufrirá correcciones);  local y de certificaciones. Esta última no es cuestionada en absoluto en el texto que comentamos, por el contrario, es definida como un supuesto acuerdo, en circunstancias que el mismo Departamento de Educación del Colegio, en su declaración del 9 de marzo del 2012, sostuvo que la existencia de distintos sistemas de evaluaciones no hacía más que “transformar la evaluación profesional de desempeño docente en Certificación de Competencias y calificaciones” cuestión que implica poner una “lápida a la profesión docente y su profesionalización”.

SEXTO: Del sistema previsional y jubilación o salida de la carrera no dice nada (al igual que el proyecto de Piñera), ni siquiera el texto lo incorpora entre los puntos en desacuerdo ¿Qué ya no existe esta demanda?

SÉPTIMO: es inaceptable que aún no se entregue por parte del MINEDUC la propuesta de remuneraciones de la nueva carrera. Si el Gobierno no la tiene, cosa que dudamos, exigimos que exprese su posición formal ante los montos planteados por el Colegio y la tesis según la cual, todo aumento salarial se estructurará con predominancia absoluta y total del sueldo mínimo (reajuste de la RBMN) para todo el profesorado del país, es decir, en base a los aspectos fijos y no variables como bonos individuales.

EN CONCLUSIÓN, a partir del informe se puede concluir, con profunda preocupación, que no existen avances en temas de fondo entre el MINEDUC y nuestras propuestas. Solo se concretan cuestiones menores que no dicen relación con lo estructurante del desarrollo de nuestra profesión.

Por otra parte, queda en evidencia que el autor del texto tiene la clara intencionalidad de alinear nuestras propuestas con la del MINEDUC para lo cual incluso se incorporan mañosamente planteamientos que nunca los profesores hemos asumido.

En estas circunstancias, no queda más que:

Exigir un documento oficial, con timbre y firma del Ministro de Educación y de los Dirigentes Nacionales del Colegio que participaron de la mesa de trabajo, que especifique los alcances de las conversaciones sostenidas. Exigir que el Proyecto de Carrera no sea enviado por el Gobierno al Parlamento si previamente no hay una Consulta Nacional Universal, sólo ahí se podrá afirmar que la fase pre-legislativa se agotó.

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