Asistentes de la educación exigen normativa laboral

El Consejo Nacional de Asistentes de la Educación, que reúne a más de 93 mil trabajadores en Chile, exige una normativa laboral que regule sus funciones y remuneraciones. Hoy, 17 de octubre, dirigentes y parlamentarios entregaron una torta al ministerio de Educación, de manera simbólica, y cantaron el cumpleaños feliz, al cumplirse un año de la firma del acuerdo entre el Gobierno y parlamentarios para realizar una mesa de trabajo respecto al tema.

Dentro de las demandas y la discusión por mejorar el sistema educacional para que sea gratuito y de calidad, se ha dejado de lado a algunos actores sociales que no dejan de ser importantes en este debate. Los asistentes de la educación, ya sean los sicólogos, los contadores, los inspectores, el tío del aseo, el bibliotecario o el cuidador, son trabajadores que han estado por mucho tiempo abandonados en cuanto a normativas laborales se trata.

El compromiso incumplido respecto al sector, data de cuando Sebastián Piñera era candidato, época donde firmó un acuerdo donde se comprometió a crear un marco regulatorio de las labores del gremio.

Hace un año atrás, parlamentarios de diferentes sectores firmaron una solitud de apoyo a esta demanda y exigiendo la elaboración de la mesa de trabajo.

En diciembre de 2010 el ex ministro de Educación, Joaquín Lavín, firmó con el Consejo Nacional un “Protocolo de Acuerdo” donde se comprometió a que en el mes de marzo de este año se instalaría la mesa de negociaciones entre el Mineduc y los representantes del sector, para iniciar el trabajo de construcción del Estatuto.

Desde agosto que están estancadas las reuniones con el ministro de Educación, Felipe Bulnes, donde se estaba formulando la mesa de trabajo. El argumento de la suspensión, como comunicó el Consejo Nacional de Asistentes de la Educación, fue el paro de los Estudiantes. Escarez dijo que en agosto le hicieron saber al Ministro que solidarizaban totalmente con los estudiantes.

LA FALTA DE REGULACIÓN EN EL SECTOR

El presidente del Consejo Nacional de Asistentes de la Educación, Arturo Escarez, comentó que en el gremio no tienen norma que regule el quehacer laboral. “Cuando hablamos de los asistentes podemos nombrar a un auxiliar, a un portero, al inspector o la secretaria. Pero lo que tienen que hacer cada uno no está claro y reglamentado”, aseguró.

En cuanto a la remuneración, la mayoría trabaja por el mínimo. Y el incentivo al retiro no está estipulado como ley. Escarez dijo que esas asignaciones se lograron, pero con fecha de término y necesitan prorrogarlas año a año. “Se ha firmado un acuerdo por el incentivo al retiro con cinco gremios, pero con nosotros no hay intención de avanzar, además no nos quieren recibir, por eso hoy nos hacemos acompañar por parlamentarios”, indicó.

Verónica Kohnenkamp Olivares, presidenta de Afadem (Asociación de Funcionarios de Asistentes de la Educación Municipalizada) de Curicó, comentó que existen muchas irregularidades en este sector de trabajadores. “Tras una negociación de 11 meses un funcionario que trabajó 40 años recibe sólo 5 millones de pesos, por eso nadie se quiere retirar”, explicó.

En Curicó ocurrieron dos despidos a funcionarios que llevaban dos años contratados. La dirigenta cree que es una irregularidad más. La razón de la destitución fue la reprobación de un test sicológico que se realiza al momento de entrar al trabajo de asistente. “Después vemos cómo entran amigos de quienes nos despiden”, criticó Kohnenkamp.

Los diputados Rodrigo González (PPD) y Jorge Tarud (PPD) acompañaron a los dirigentes, para entregar una carta a la oficina de partes reiterando el apoyo y exigiendo la conformación de la mesa de trabajo. A la vez llevaron los tres Proyectos de Acuerdo que solicitan “normar el estatuto para entregar solidez en el trabajo de los asistentes de la educación”, expresó Tarud.

Rodríguez le entrega gran importancia a la labor de los asistentes porque ellos se encargan de la “protección de los niños ya que están en directa relación con ellos. Es necesario que su trabajo se haga con calidad, resguardo y con las calificaciones técnicas que se requieren”.

El diputado considera que este silencio con los actores sociales por parte del Gobierno es porque no “entienden la necesidad de tener una educación pública y de calidad. El problema es la falta de diálogo y voluntad política, lo mismo que ocurre con el movimiento estudiantil”. A su vez, Tarud opina que la espera se debe a “dejación y falta de eficiencia”.

Escarez agregó que han presentado propuestas al Ministro, sin embargo, en el presupuesto para el próximo año no se tomaron en cuanta sus proposiciones.

Quien recibió la torta fue el jefe de gabinete German Subercaseaux, quien puntualizó su agrado ante la manifestación pacífica de los empleados. Ante esto la dirigenta de Afadem, le dijo que parece que van a tener que cambiar la forma de negociación porque hasta ahora no han tenido respuestas.

Por Estefani Carrasco Rivera

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El Ciudadano