Pese a que Sebastián Piñera afirmó que, debido a una mejoría presentada en el área de Lectura en los 4°s Básicos, la brecha en educación “se acortó”, investigadores critican la dependencia de medidas estandarizadas a la hora de evaluar la calidad de la educación.
Un aumento de 9 puntos registrada por la prueba Simce 2010 (Sistema de Medición de Calidad de la Educación), de 4° Básico en el área de Lectura, que implica el mayor avance de un año a otro desde que existen los registros de medición, fue uno de los motivos por el que el presidente Sebastián Piñera, acompañado por el ministro de Educación, Joaquín Lavín, se refiriera a estos, y otros logros, como una “buena noticia”.
En ese contexto, ambos se reunieron hoy miércoles, 6 de abril, en la Biblioteca Nacional para dar a conocer los resultados de la prueba Simce del año pasado, realizada por más de 470 mil estudiantes de 4° Básico y 2° Medio, de establecimientos educacionales de todo el país.
Además del aumento en Lectura, la máxima autoridad en el área de Educación destacó el alza de 6 puntos en el test de matemáticas realizado por los alumnos de 2° Medio, no obstante esta área presenta el mayor estancamiento en los últimos años, comparada con Lectura.
Pese a que, tanto Piñera como Lavín, reconocieron la labor hecha por los gobiernos anteriores en Educación, así como el enfoque que, según ellos, está poniendo el actual Ejecutivo en un área tan sensible como ésta, la realidad muestra que, nuevamente, son los establecimientos particulares pagados los que lideran, casi sin contrapeso, el ránking de los resultados totales.
Ello, a pesar de que en esta medición, en el área de Lectura de 2° Medio, dos colegios municipales –el Instituto Nacional y el Liceo Carmela Carvajal– lideran la tabla.
PROBLEMA ESTRUCTURAL
Sin embargo, no todos comparten la excesiva “fijación” que el actual Gobierno –y los anteriores– tienen sobre el actual sistema de medición de la educación.
Para Mario Sobarzo, miembro del Observatorio Chileno de Políticas Educativas (Opech), el Simce como fórmula es “una estrategia que es altamente regresiva, respecto a lo que es el trabajo enseñanza-aprendizaje”. Según explica, el sistema educativo termina dependiendo de un “puntaje altamente estandarizado, y que está muy en la línea de lo que le interesa al pensamiento conservador a nivel internacional, no solamente en Chile”.
Sobarzo explica que existe una “tendencia desde los organismos económicos mundiales” que tienden a estandarizar las mediciones, lo que, según “muestra la evidencia internacional, eso es muy malo”, ya que tendría efectos “regresivos” en los alumnos, independiente de los resultados. Por eso, según Sobarzo, el problema de fondo, más allá de los resultados de los alumnos, y es que éstos “no tienen acceso a los bienes de capital, a los bienes simbólicos, una vez que salgan del sistema escolar (…) El sistema de segmentación chileno, por mucho que te ayude a mejorar los puntajes, no te ayuda a mejorar socialmente”.
Según el experto, estas mediciones no son más que “voladeros de luces”, mientras no se resuelva el problema de la desigualdad social en Chile.
¿MEDICIÓN O MÁRKETING?
Mario Sobarzo indicó que “ni los ingleses, que inventaron los sistemas estandarizados, lo siguen aplicando hoy en día”. En vez de eso, explicó el experto, en países como Finlandia “hacen evaluaciones o muestras confidenciales de un grupo de estudiantes representativos, y solamente se las muestran a las propias escuelas o a los propios interesados. No lo utilizan como mecanismo de marketing, como se utiliza aquí en Chile”. Diversos indicadores señalan que Finlandia tiene uno de los mejores sistemas educativos del planeta.
Por ello, para Sobarzo, la educación chilena “sigue siendo dirigida por criterios puramente econométricos”. Mientras la riqueza siga en manos de unos pocos, explica el experto, la actual educación no va a resolver los problemas sociales, por ello propone que, el sistema de evaluación externo a la escuela tiene que manejarse por criterios que permitan mejorar “en las áreas de gestión y en las áreas de enseñanza-aprendizaje que están fallando”.
Ello, porque de lo contrario, explica Sobarzo, la evaluación termina siendo reducida a una serie de contenidos básicos que basta con aprenderlos para contestar las preguntas estandarizadas. “De hecho –cuenta- (en muchos colegios) sólo les enseñan cosas que estén ligadas al Simce, porque van a ser medidos, y porque es importante para las matrículas en los colegios particulares pagados, pero que no genera una transformación”.
Sobarzo señala que, si nuestro país desea contar con un sistema de evaluación de calidad de la educación que tenga alguna utilidad, “hay que sacar el marketing, hay que sacar la utilización por parte de las escuelas de esto (la publicidad) para poder conseguir matrícula, y hay que terminar con el tema de la competencia para conseguir matrícula, porque es regresivo para la educación”.
“El problema es la estructura social” indica Sobarzo, y cita un estudio del Centro de Investigación en Estructura Social (Cies) de la Universidad de Chile, publicado recientemente, y donde expresa que es un error la creencia de que la calidad de la enseñanza tiene que ver con el tipo de establecimiento educacional (si es municipal, subvencionado o particular), sino que está más bien vinculada a los efectos del nivel socioeconómico.
Ante la constante fuga de colegios municipales a particulares subvencionados bajo la creencia de que éstos ofrecen una educación de mejor calidad, este estudio plantea que en los sectores más bajos casi no hay diferencias en los resultados de mediciones entre estos dos tipos de colegios, y que los liceos municipales de nivel medio-alto cuentan con mejores resultados en los puntajes, con menos cantidad de recursos que los que obtienen los particulares y subvencionados.
LOS RESULTADOS
La prueba Simce realizada en 2010 y dada a conocer este miércoles mostró un aumento de puntaje en Lectura en los alumnos de Cuarto Año Básico. En esta área se registra un aumento de 9 puntos respecto de la medición anterior, lo que representa la mayor alza de un año a otro desde que se hace la prueba.
Esta alza se visualiza en trece de las quince regiones del país, siendo la Región de Los Lagos la que más sube, con 12 puntos. Por el contrario, aquellas regiones que presentan los mayores problemas son las regiones de Atacama, del Maule y Biobío. En estas dos últimas, según Lavín, los bajos puntajes se explicarían por un “efecto terremoto”, debido a que los niños en estas zonas entraron a la escuela muy tarde, producto de los daños que provocó en los establecimientos educacionales.
En lo que respecta a los resultados de Lectura de Cuarto Básico, en este ítem disminuyó sensiblemente la brecha socioeconómica, ya que los alumnos que presentaron los mayores aumentos de puntaje corresponden al nivel socioeconómico bajo y medio bajo.
No obstante, los mejores resultados continúan siendo para los colegios particulares pagados (303 puntos), seguidos por los particulares subvencionados (276 puntos), mientras que los colegios municipales se sitúan al final de la tabla (258 puntos).
Por su parte, en el área de Matemáticas, no se registraron cambios respecto del año anterior. Sin embargo, el dato más grave se relaciona con el hecho de que desde 1999 se percibe un aumento de apenas 3 puntos en esta área académica, y donde además persisten las fuertes diferencias por nivel socioeconómico.
Al respecto, Joaquín Lavín anunció la ayuda en términos pedagógicos en los establecimientos con peores resultados en el Simce (unos mil colegios), así como de enfocar el reforzamiento en Matemáticas. Lavín espera que los liceos de excelencia se pueda revertir esta situación.
Por Christian Armaza Benavides
El Ciudadano
Hazte socio 👍
Con tu donación aportas a la sostenibilidad económica y existencia de este medio.
Elige cómo quieres aportar a la existencia y financiamiento colectivo de este medio!
Reveniu 
