Por Redacción
Con cacerolas, matracas, pancartas y hasta trompetas, la comunidad universitaria se dio cita en la entrada de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP).
Los inconformes con el conflicto legal que afecta a la universidad marcharon por el Periférico Ecológico, siguiendo por la 14 Oriente hasta llegar a la entrada del Colegio José Gaos.
Dijeron que este 30 de agosto debían regresar a clases presenciales y por el conflicto más de 10 mil estudiantes no pueden concretar sus investigaciones, prácticas y proyectos.
Vestidos con los colores de la universidad y al grito de “¡Libros sí, armas no!”, “No detengan mi futuro”, “Fuera armas de mi universidad” y “¡Queremos nuestro campus!”, los inconformes pidieron ayuda al presidente Andrés Manuel López Obrador.
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“Señor presidente nosotros no regresamos a clases, no por la pandemia, sino porque nuestra universidad está tomada por un patronato espurio”, dijeron integrantes del Comité Estudiantil.
Pidieron que se retire la policía, que se devuelva el control de las instalaciones al patronato original y que la rectora interina, Cecilia Anaya Berríos, sea quien coordine el reinicio de las actividades.
Mensaje de uno de los rectores
En un comunicado, Armando Ríos Piter, uno de los tres rectores que de alguna forma tiene actualmente la universidad, dijo que:
“Desde el primer momento en que tomé posesión como rector subrayé mi compromiso por garantizar que la vida de la comunidad universitaria transcurriera de la forma más normal y estable posible. Hoy, pese al conflicto jurídico prevaleciente, la UDLAP está en marcha y trabaja de manera habitual. Se han garantizado los pagos a maestros, personal administrativo y trabajadores. También, desde el 9 de agosto, se logró el regreso ordenado a clases en línea”.
Agregó que “funcionarios cercanos a las autoridades anteriores no han mantenido la actitud imparcial que requiere la institución (…) En lugar de asumir una posición neutral que garantice una visión integral del proceso, han preferido defender la posición de solo una de las partes, compartiendo información incompleta y sesgada”.
Conflicto de intereses
El 12 de julio, Ríos Piter fue nombrado rector por el nuevo patronato de la UDLAP, pero la Fundación Mary Street Jenkins lo desconoció y apoyó al rector Luis Ernesto Derbez Bautista, quien finalmente pidió licencia para enfrentar las acusaciones en su contra por presunta responsabilidad en el delito de fraude específico.
El Patronato de la FUDLAP nombró a Cecilia Anaya Berríos, como rectora interina y confió en que Derbez Bautista demuestre su inocencia ante los tribunales.
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