Los tres principales acusados son José Luis Giusti -ex decano de la Facultad de Ciencias Económicas (FCE)-; Emiliano Yacobitti, secretario de Hacienda y Administración de la UBA y titular de la Unión Cívica Radical (UCR) porteña; y Sergio Gastón Ricardo, ex secretario de Asistencia Técnica y Pasantías de la FCE-UBA.
El caso surgió después de una investigación realizada por Alejandro Bercovich, siendo el caso popularmente conocido como “buenos muchachos” debido al nombre que se le puso en el programa de C5N. El 24 de junio pasado, se dio cuenta de posibles hechos de corrupción a partir de contrataciones irregulares entre el Hospital de Clínicas y proveedoras de insumos y medicamentos, dando lugar a sobreprecios y actos de corrupción.
De acuerdo a lo señalado por el fiscal Picardi, los imputados habrían utilizado el alto cargo jerárquico desempeñado en la UBA para desviar millonarias contrataciones del Hospital de Clínicas «José de San Martín» -dependiente de la universidad- hacia proveedoras de insumos y medicamentos con las cuales estaban directamente vinculados los acusados.
Sin embargo, el caso no se agota ahí. Además del enriquecimiento ilícito de los acusados, otros fondos se habrían desviado para financiar la campaña de Martín Lousteau como candidato a jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires por el frente Energía Ciudadana Organizada (ECO). Cabe recordar que tanto Giusti, Yacobitti y Ricardo se desempeñaron como parte del equipo de campaña de Losuteau.
El total de los imputados por estos delitos suma la cuantiosa cantidad de 40. La UBA se enfrenta así a un caso que desnuda la muchas veces compleja y turbia relación entre las autoridades de la institución y las distintas fuerzas políticas, una convivencia de corrupción que se ha denunciado múltiples veces por parte de las organizaciones estudiantiles.