Hoy día 28 de abril del 2010, los estudiantes salimos a las calles exigiendo el fin a las alzas en la tarifa escolar y adulta, así como el restablecimiento de otros beneficios que nos han sido quitados a los estudiantes.
El pasado 17 de abril de manera arbitraria y no informada se decidió subir en $10 la tarifa escolar del Transantiago y el Metro, quedando ahora en una cifra de $140 pesos, acompañada del alza en la tarifa adulta de $20.
La mayoría de los estudiantes que hacen uso de este “servicio” no estaban al tanto de la medida y debieron ver con resignación como el marcador arrojaba $140 al momento de pasar la tarjeta, aún cuando el mismo Panel de Expertos del Transporte Público (quienes desde este año definen los valores de los pasajes) estableciese que “la tarifa en Transantiago y Metro para alumnos secundarios y de educación superior que porten la Tarjeta Nacional Estudiantil (TNE) se mantendrá en $130, de lunes a domingo, las 24 horas del día, durante todo el año escolar 2010”.
Sin embargo, las cosas se veían mal de hace un tiempo, sobretodo cuando muchos de nosotros nos enteramos de que ya no existían los pases provisorios para aquellos que estaban en proceso de reposición, obligados así a pagar adulto con todos los costos que ello conlleva y por a lo menos 3 semanas. A todo lo anterior que hay que sumar la eliminación de la venta de boletos individuales en el Metro y el desconocimiento en este medio de transporte hacia los certificados de alumno regular.
La noticia del alza del pasaje escolar y adulto nos cae como un balde de agua fría, sobretodo considerando que en diversos medios se ha filtrado que en el próximo mes se realizarían alzas de similar magnitud, siendo el mismo Panel de Expertos quien ha dicho que de aquí a fin de año la tarifa adulta debiese estar cercana a los $500.
Recordemos que el Transantiago comenzó a ser implementado el 2007 con un costo anual estimado de un poco más de US$ 1.000 millones. Sin embargo, los evidentes problema de implementación y el masivo rechazo popular obligaron al Gobierno a subsidiar con dineros estatales a las empresas que ganaron las licitaciones del mal llamado transporte público, con un costo anual de US$ 1.500 millones.
De acuerdo con el plan trazado por el entonces ministro de Transportes René Cortázar, el subsidio estatal a las empresas debe ir disminuyendo a medida que suben las tarifas, es decir, en la medida en que las empresas son capaces de ser “autosuficientes” para obtener ganancias a costa de los bolsillos de los usuarios.
De cualquier forma, ya sea a través del subsidio estatal (con dineros pertenecientes a todos los chilenos) o mediante las alzas tarifarias, son los usurarios (trabajadores, dueñas de casa, estudiantes, adultos mayores) quienes terminan costeando el lucro de las empresas del transporte.
Desde ese entonces la tarifa adulta ha ido subiendo paulatinamente bajo distintos argumentos que van desde el alza en los combustibles, el mejoramiento del servicio o el evitar la evasión, culpables hoy en día de todos los males del transporte según el gobierno.
El alza tarifaria no responde a ninguna de las argumentaciones dadas en los últimos días, sino a la necesidad de tener un sistema mercantil de transporte que es capaz de generar sus propias ganancias en base al cobro a los usuarios, no siendo necesario recurrir a la ayuda estatal.
Se han anunciado más alzas, tanto para la tarifa adulta como escolar, y muchas son las voces dentro del gobierno actual que claman por reducir a dos horas o menos el tiempo para realizar transbordos.
Considerando las dificultades de muchas familias chilenas, de los estudiantes en Santiago que provienen de zonas afectadas por el terremoto y el abuso que constituye esta medida, es que hoy miércoles 28 los estudiantes de Santiago salimos a las calles a protestar exigiendo el congelamiento de la tarifa escolar y adulto a los precios anteriores al 17 de abril, el restablecimiento del pase escolar provisorio, el restablecimiento de la venta de boletos individuales en el Metro y la validez de los certificados de alumno regular para cancelar tarifa escolar.
Los estudiantes nos encontramos organizados y en estado de alerta. Y no nos detendremos hasta conseguir nuestros objetivos.