Desafíos y proyecciones de los berries chilenos fueron eje de congreso realizado en la UFRO

Un rubro que ha aportado al liderazgo chileno de la fruticultura en el mundo es el de los berries. Un importante desarrollo en los últimos 50 años en cuanto a producción y exportación ha llevado a estos demandados frutos a un sitial que actualmente implica no sólo mantener altos estándares de calidad, sino también mirar con atención los desafíos futuros.

Precisamente para conocer los avances científicos y desafíos de este rubro, se realizó en la Universidad de La Frontera la segunda versión del Congreso Chileno de Berries, organizado por la Facultad de Ciencias Agropecuarias y Forestales junto a la Sociedad Chilena de Fruticultura (Sochifrut).

Se trató de un evento que convocó a investigadores nacionales y extranjeros, y reunió a los distintos actores que participan de la industrial. En la ocasión, el presidente de la Comisión Organizadora, el académico Walter Lobos, señaló que el Congreso es un punto de encuentro científico técnico sobre el mundo de los berries, ya sean cultivados o nativos, pensado para presentar y compartir información, junto con ser instancias necesarias para continuar con el desarrollo tecnológico y agroalimentario del país.

Por su parte, el presidente de Sochifrut, Jorge Retamales, a modo de evaluación destacó que el evento reunió una amplia variedad de trabajos interesantes que abordaron ámbitos como mejoramiento genético, prácticas de manejo sustentable, impacto de determinados tratamientos, postcosecha, entre otros. “La mayor parte de las investigaciones tienen una mirada hacia el sector productivo, en el sentido de acoger los problemas que éste tiene y tratar de ofrecer soluciones”, comentó.

En ese sentido, indicó que en Chile la inversión en investigación es baja, “por ejemplo, estamos con cifras que son casi la mitad de Argentina, la décima parte de lo que se invierte en Corea; entonces, si realmente queremos progresar tenemos que invertir en el futuro, tener más investigadores y fondos más potentes”.

APORTES DE LA INVESTIGACIÓN

El Congreso contó con la participación de expertos en fruticultura. Uno de ellos fue el Dr. Fumiomi Takeda, investigador del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), quien a través de dos conferencias compartió su experiencia en estudios que han aportado al desarrollo productivo de los berries.

En una de sus intervenciones abordó las oportunidades que se han abierto en Estados Unidos para el cultivo de moras de calidad en condiciones ambientales adversas (bajas temperaturas, por ejemplo) a través del desarrollo de un sistema de producción, que nace de la investigación, para mitigar el impacto de daño por frío, cuya base es un brazo rotatorio con un diseño modular para manejar plantas que tienen un crecimiento erecto, expandiendo con ello las zonas de cultivo de esta baya.

Los asistentes también pudieron conocer de primera fuente los avances científicos para la medición de daño en el proceso de selección en arándanos. El Dr. Takeda explicó el trabajo investigativo de años que permitió crear un sensor denominado BIRD, que mide los impactos de las faenas en este tipo de frutas, tanto de cosecha como en las líneas de embalaje.

El investigador norteamericano indicó que actualmente trabajan en el desarrollo de una generación más avanzada de este sensor que mide la fuerza de los golpes en la fruta, todo esto en pos de llegar a los consumidores con arándanos frescos en perfectas condiciones.

Otro de los expertos invitados fue el investigador italiano de la Universidad de Bologna, Dr. Adamo Rombolá, quien se refirió al desarrollo de sistemas agrícolas altamente sustentables y su potencial aplicación en la industria de los berries.

Recalcó que algunas de las técnicas de agricultura sustentable podrían ser aplicadas no sólo por pequeños agricultores, sino también en predios más extensos. En ese sentido, destacó que un país como Chile, donde se impulsa fuertemente el sector frutícola para exportación, las condiciones ya están maduras para llegar a los mercados con frutos que procedan de este tipo de agricultura, aprovechando las ventajas que ello trae.

Desde esa perspectiva, enfatizó que en la mirada de futuro, la investigación juega un rol fundamental en apoyar a la agricultura, especialmente en lo relacionado con la sustentabilidad.

MIRADA DE FUTURO

Para la Dra. Pilar Bañados, experta de la Pontificia U. Católica de Chile, en la visión del sector frutícola es importante estar atento a “cómo viene el futuro para los berries”, observando qué está pasando de forma incipiente en diferentes partes del mundo. “Estamos hablando de nuevas variedades de arándano, frambuesa, mora; también sistemas de producción fuera de suelo, el empleo de luces led, algo de robótica, por ejemplo”, comentó.

La investigadora destacó que en lo próximo, Chile para seguir avanzando debería mirar hacia el recambio de variedades, así como aumentar densidades de plantación, cambiar sistemas de preparación de suelos y de arquitectura de los huertos, entre otras acciones.

En esa perspectiva, Jorge Retamales destacó que una de las claves está en colocar el foco en obtener mayor valor por hectárea, lo que implica una relación entre volumen y calidad.  “No se trata de llegar con más cantidad de fruta, sino que ésta llegue con estándares de calidad que sean aceptables por los mercados de destino. Ahí tenemos que ser más exigentes y estar atentos para evitar que fruta de mala calidad afecte a toda la fruticultura chilena”.

OPORTUNIDADES Y DESAFÍOS PARA EL ARÁNDANO

Chile es el segundo proveedor de arándanos frescos en el mundo después de Estados Unidos, el mayor del hemisferio sur y el principal actor en el periodo de contra temporada (noviembre a abril). Un liderazgo que implica permanentes desafíos explicó Andrés Armstrong, director ejecutivo del Comité de Arándanos de la Asociación de Exportadores de Frutas de Chile (Asoex), en su intervención en el Congreso.

A su juicio, en cierto grado la posición de liderazgo está siendo amenazada por la participación de otros países productores que coinciden con las semanas en que Chile está en el mercado con arándanos frescos. Por ello, la calidad es fundamental: “El consumo de arándano crece, pero para eso necesitamos un buen producto, que nos permita llegar a los consumidores y que ellos tengan una buena experiencia, repitan esa compra y así aumentar el consumo”.

El horizonte también apunta a la apertura de nuevos mercados. En ese sentido, explicó Armstrong, Chile tiene ventajas que hay potenciar: “Somos el único país que tiene acceso con arándanos frescos a China y los únicos, junto al Estado de Oregón, con llegada a Corea, además estamos negociando un mejor protocolo con India, por ejemplo”.

En cuanto a promoción, el trabajo apunta a aumentar la base de consumo a través de campañas que posicionen al arándano chileno. Desde el punto de vista productivo, y frente a la competencia, la apuesta también es a la renovación varietal, enfocada en tener una cosecha óptima en cuanto a calidad, agregando que a los desafíos hay que sumar la disponibilidad de mano de obra, que es intensiva en algunos periodos, especialmente en la cosecha.

Vía: http://www.ufro.cl/index.php/