Hace unos días nos llegó esta carta de una estudiante de un colegio particular subvencionado de la comuna de Puente Alto. Su relato es una vívida crónica del tira y afloja entre estudiantes y la dirección del colegio, que fue el primero en su tipo que se sumó a la movilización de los secundarios de la cordillerana comuna. La noche de este sábado aún están en toma acompañados de apoderados. Y dice:
Hola. Soy Fabiola, dirigente estudiantil del colegio San Carlos de Aragón, de la comuna de Puente Alto, el primer establecimiento particular subvencionado en toma.
Nuestra situación es crítica, nos fuimos a toma el día miércoles 8 de junio del presente a través de un plebiscito que ganó con un 70%. Antes el director de nuestro establecimiento nos había propuesto en una reunión de presidentes de curso, que si el movimiento estudiantil que recién estaba surgiendo llegaba al punto de las tomas, él no tenía problemas en entregarnos las llaves.
El día martes 7, realizamos una jornada reflexiva en la cual se informó mucho más a las bases. Finalizado este acto fuimos a negociar la toma la cual fue negada rotundamente y se dijo que tenían que estar más del 90% de los establecimientos en toma como para darnos entrega de las llaves.
Al día siguiente se realizó una asamblea con estudiantes, dirección y profesores, donde nuevamente nos negaron nuestra petición y se volvieron a contradecir con lo dicho anteriormente. Además no tomaron en cuenta el plebiscito.
Terminado esto, por decisión del estudiantado nos tomamos el colegio. En este acto hubo agresiones físicas de parte de inspectores a estudiantes, pasamos la noche sin luz y el agua la logramos dar después de mucho tiempo. Nos arreglamos la noche por nuestra cuenta.
El día jueves 9 por la mañana, salimos del colegio temprano debido a que nos habían pedido desalojarlo, dejando todas las mesas y sillas puestas. Nos quedamos afuera sin dejar entrar a nadie hasta que fueran las 8 para iniciar una mesa de diálogo con dirección, los voceros y el alumnado presente.
Esto fue aceptado en un principio por parte del director e inspector general. Al cabo de un rato se le pregunta al director si era posible que el presidente del Colegio de Profesores de nuestro sector nos asesorara en la asamblea. A esta petición él accedió, pero al momento de negociar, ellos negaron haber aceptado entrar a dialogar con nosotros y también que accedieron a que fuéramos asesorados.
Debido a esta situación volvimos a entrar todos al colegio y luego nos terminaron desalojando pacíficamente alrededor de las 5 de la tarde. Decidimos quedarnos afuera protestando y terminamos pasando la noche a la intemperie, en consecuencia a nuestra situación muchos medios de prensa se interesaron en nuestro caso.
El día viernes 10 decidimos hacer paro el cual se logró muy exitosamente (entraron a clases alrededor de 30 personas), también se decidió regresar a nuestros hogares debido a que sería muy peligroso pasar la noche afuera el fin de semana.
El domingo 12 volvimos a las 9 de la noche a seguir luchando por la causa y durmiendo afuera nuevamente, llegando el lunes 13 realizamos un paro afuera del colegio, intentando negociar la toma otra vez y las respuestas fueron no ante todo.
Terminamos entrando al colegio tomándolo una vez más. En esta situación una apoderada golpeó con un combo en la cara a una alumna y al momento de entrar el colegio escondió a la apoderada y la hizo salir por otro lado.
A partir del lunes 13 estuvimos en toma hasta el martes 21 donde fuimos desalojados pacíficamente, llegando dos micros de fuerzas especiales con patrullas de carabineros.
El miércoles 22 por la madrugada se volvió a tomar el establecimiento donde se encuentran a 5 supuestos guardias que no contaban con sus licencias respectivas para ejercer el oficio y además dieron identificaciones falsas. Para el día viernes 24 se cita a todos los apoderados a una reunión general para hablar de este tema a las 5 de la tarde, según ellos quieren explicar el movimiento estudiantil, lo cual como estudiantes del colegio San Carlos consideramos una de sus últimas cartas para intentar funar el movimiento a través de nuestros padres.
Dentro de todo en este periodo anteriormente relatado se han vivido situaciones de represión, se nos dijo que a todos los dirigentes ya les tenían colegios preparados para el segundo semestre dejándonos a todos separados, que también habría suspensiones y condicionalidades para las bases.
Hemos sufrido de persecuciones y burlas por parte de inspectores, se comenzó a citar apoderados a parte de la reunión general para todas las cabezas del movimiento en el establecimiento.
Hace poco nos enteramos de fuentes muy confiables que ellos de alguna manera ven nuestros muros en Facebook para intentar obtener información. Dirección muchas veces se ha negado al diálogo y luego dice que nosotros somos los que no deseamos hablar. Innumerables veces nos dicen cosas y luego las desmienten dejándonos como locos; se han presentado agresiones físicas hacia el alumnado las cuales también fueron negadas.
Hoy en día mi fututo en el colegio y para muchos es incierto, además contamos con que si nos dejan seguir estudiando en él estaremos con el constante hostigamientos por parte de ellos.
Nosotros simplemente estamos apoyando la causa nacional, respaldándonos al petitorio nacional basado en los 4 ejes centrales los cuales tienen que ir regidos por un cambio constitucional; pensamos que es mucho más importante apoyar este petitorio a que regirnos primordialmente por el interno.
Fabiola
Estudiante Colegio San Carlos de Aragón
El Ciudadano
VEA ADEMÁS Una clase con los estudiantes en toma de Puente Alto
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