El pasado martes 10 de octubre, 80 trabajadores del Liceo Salesiano Camilo Ortúzar Montt de Macul iniciaron una huelga legal, enmarcada en el proceso de negociación colectiva.
Los trabajadores están agrupados en un sindicato único, que agrupa a administrativos, auxiliares y profesores, quienes demandan «mejorar las condiciones laborales y salariales de los trabajadores que ganan menos, en este caso, los auxiliares de aseo y la gente de mantención del colegio”, según afirmó a El Ciudadano el profesor de Lenguaje Marcelo Mora.
“Los profesores no estamos pidiendo plata. Solo pedimos tiempo, que nos suelten un poco antes, porque en los años anteriores nos vamos siempre el 16 de enero, cosa que no se condice mucho con la realidad de otros colegios salesianos, puesto que casi siempre se van el 31 de diciembre o en la primera semana de enero”, agregó el docente.
Mora relata que desde el inicio de la movilización han realizado una jornada de movilización afuera del colegio, desde las 7.30 a las 17 horas. El objetivo es flexibilizar la postura de la Congregación Salesiana, institución que ha mostrado resistencia al pliego de demandas de los trabajadores.
“La empresa ofreció un aumento de $7 mil mensuales a los 11 trabajadores con sueldos menores del colegio y a los profesores nos ofrecieron el día libre para nuestro cumpleaños, pero solo si teníamos más de cinco años de trabajo”, comentó el profesor Mora.
A su vez, precisó la posición del sindicato. “Estábamos planteando que se aumenten los bonos de locomoción y colación y que se aumente alrededor de $20 mil a los trabajadores con menos remuneraciones, cosa que tuvo una negativa rotunda por parte de la Congregación”, señaló.
Respecto de las conversaciones entre ambas partes, Marcelo Mora relató a este medio que «el día que votamos huelga, tuvimos un acercamiento solo en el tema de los tiempos de los profesores, que relativizaron soltarnos los primeros 10 días hábiles de enero y no hubo acuerdo en lo absoluto con el tema de las remuneraciones de los auxiliares de aseo”.
El docente subraya que la situación es urgente, puesto que, en estos momentos, el funcionamiento del liceo recae en el trabajo de 15 profesores y 4 auxiliares que no integran el sindicato.
“La idea es solucionar el problema lo más pronto posible y destrabar la huelga, porque afecta sobre todo a nuestros cuartos medios. Obviamente nos interesa acercar las partes, pero no vamos a transar en el tema de los tiempos y necesitamos que se le suban las lucas a la gente de aseo y mantención”, aseveró.